La parálisis cerebral es un trastorno neuromotor provocado por una lesión en las áreas motoras del sistema nervioso central causado a su vez, en la mayoría de los casos, por anoxia durante el parto y, durante la primera infancia, derivada de otras complicaciones. Se estima que en la provincia existen 2.300 personas afectadas.

En definitiva, se trata de una falta de oxígeno en el cerebro, y las consecuencias a nivel intelectual y motoro pueden ser severas. Así lo explica Mercedes Castro Sánchez, presidenta de la Asociación de Padres de Paralíticos Cerebrales de Málaga (Asppacema), entidad que lleva ya tres años de andadura.

Esta asociación es el resultado de la unión de una veintena de padres que buscan la mejora de la calidad de vida de estas personas, en este caso, sus hijos. Todos tienen una misma inquietud que es el miedo a que la edad les incapacite a ellos y no puedan ya cuidar de sus eternos pequeños, que son en todos estos casos gravemente afectados.

Por ello trabajan en un proyecto que anhelan ver hecho realidad, que es la creación de una residencia mixta, tanto para padres como para hijos, que dé cobijo a estos casos cuando se produzcan. Para la consecución de tal fin están a la espera de la declaración de utilidad pública, trámite necesario para la cesión de terrenos y la ejecución de este tipo de iniciativas.

Tener un hijo con parálisis cerebral no es sencillo y denuncian que son muchas las carencias y que en ningún caso se cubren las atenciones y terapias que requieren estas personas. Por ello, persiguen además que se logre una atención funcional, se incrementen las plazas para respiro familiar, así como que se propicie el acceso a tratamientos y sistemas alternativos nacionales e internacionales.

Son muchas las horas empleadas por estas personas en el cuidado de sus hijos, aunque para ellos el cariño y la mirada que reciben a cambio merece y compensa todos estos esfuerzos. Y es que los grandes dependientes requieren de atención y ayuda las 24 horas de los 365 días del año para realizar absolutamente todas las actividades cotidianas: comer, levantarse, acostarse, ducharse. En la asociación, estas personas han encontrado el calor y el apoyo que necesitaban. «Tratamos de suplir entre nosotros mismos la falta de medios», dice Mercedes.

Causas y consecuencias

Las causas pueden ser diversas: una dificultad antes del nacimiento, quizás debida a que el bebé tiene problemas para respirar adecuadamente; un hematoma cerebral o una hemorragia intraventricular que se pueden producir antes del nacimiento; una malformación en el cerebro sin un motivo aparente, un trastorno genético que se puede heredar aunque los padres estén completamente sanos, una incorrecta asistencia durante el parto, ante el nacimiento muy prematuro del bebé; u otras causas como infecciones del cerebro (meningitis), accidentes (ahogamientos), etc., que suceden en los primeros años de vida. Las consecuencias son muy diversas y pueden afectar al pequeño tanto intelectualmente como de forma motora.

Con el objeto de ayudar a los fines de este colectivo ayer domingo a partir de las once horas la asociación de vecinos Nuevos Cipreses en colaboración con el grupo motero Águilas del Sur organizaron un moto-almuerzo cuya recaudación irá en beneficio de Asppacema.

El evento tuvo lugar en la sede de la asociación, en el Centro Ciudadano María Zambrano en la calle Las Moreras número 2 (Ciudad Jardín). Y es que estos padres no piensan escatimar esfuerzos para mejorar el presente y futuro de los paralíticos cerebrales y quieren abrir camino.