La concejala de Playas del Ayuntamiento de Málaga, Teresa Porras, presentó esta mañana las VIII jornadas de divulgación en las playas de la capital sobre prevención en situaciones de riesgo. Así, durante los próximos domingos 4, 11 y 18 de julio, a partir de las 12.00 horas, las playas de El Dedo, la Misericordia y de Guadalmar, acogerán los simulacros de emergencia y las actividades organizadas por Asociación de Expacientes de la Unidad de Medicina Intensiva (Expaumi).

El personal del Servicio de Emergencias 061 será el encargado de explicar a los participantes cómo actuar en caso de ataque cardíaco, ahogamiento o atragantamiento, ya que son las causas más frecuentes de emergencia entre la población.

La finalidad de estas Jornadas es hacer llegar al ciudadano las formas de prevenir estas situaciones de peligro, y el objetivo de los simulacros es "intentar sensibilizar a la población sobre qué hacer", según explicó Ángel García, médico en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Clínico, al tiempo que calificó las instrucciones de "simples y fáciles".

"Si queremos salvar vidas, hay que salir de la UVI", añadió el facultativo, quien destacó en rueda de prensa la importancia de la prevención y de saber qué hacer en casos de emergencia.

Las Jornadas de Divulgación en Playas Malagueñas se llevan realizando desde 2003, y el año pasado más de 5.000 personas vieron los simulacros, y el 80 por ciento de los asistentes se apuntaron a recibir los cursos de Soporte Visual Básico, según la organización, por lo que, este año, la organización prevé una asistencia masiva por parte de la población malagueña.

"Cada año cambia la situación", declaró Jorge Peña, trabajador del 061 y colaborador en las Jornadas, ya que, según indicó cada vez hay más personas que son capaces de reaccionar en momentos de tensión y ayudar a quien lo necesita de la forma adecuada.

El médico en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Clínico señaló la necesidad de tener en cuenta que, por ejemplo, el 75 por ciento de las paradas cardíacas ocurren en el domicilio o en el trabajo. "Nunca ocurren en un centro sanitario", apostilló García

Según García, el 90 por ciento de las veces se espera a la ambulancia "sin hacer nada", y la primera intervención en una situación de emergencia "puede ser clave para salvar una vida", ya que "si en los primeros cuatro o cinco minutos no se actúa, las posibilidades de que la persona en peligro salga viva o sin secuelas es mínima".

Por ello, a juicio de Peña, es fundamental activar las dos herramientas de ayuda: primero, llamar a los servicios de emergencia, y en segundo lugar, practicar los primeros auxilios o Soporte Vital Básico. "Todos los ciudadanos deberíamos saber actuar, saber prevenir y hacer lo máximo posible antes de que lleguen los servicios de emergencia", añadió Peña.