La consejera de Obras Públicas, Rosa Aguilar, insistió ayer en recriminar la «actitud desleal» del alcalde por llevar una propuesta que había filtrado antes a los medios de comunicación y le envió el mensaje de que «con filtraciones de advertencias no se puede trabajar». Aguilar consideró que esas filtraciones «impiden realizar el trabajo definitivo para culminar el plan urbanístico». No obstante, insistió en que el objetivo de la Junta es que Málaga tenga cuanto antes el PGOU, pero debe hacerse «desde la lealtad y la confianza mutua». «La Consejería está dispuesta a sentarse una y mil veces para solucionar definitivamente el PGOU malagueño», concluyó la responsable de Obras Públicas.