Oídos hacia dentro y hacia fuera. Propuesta de todos y para todos. El proyecto del Soho nace con la premisa de la participación, aunque con un punto de partida, resumido en sus líneas capitales, que ya ha servido para cautivar a políticos y responsables del mundo de la cultura. El bosquejo incluye aspectos económicos, urbanísticos y, por supuesto, ,de movimiento ciudadano. Una nueve energía para el barrio sintetizada en varios puntos.

En sintonía con el PGOU

La eliminación del tráfico en la calle Tomás de Heredia daría como resultado un paseo que sitúa en la misma avenida al mercado de Atarazanas y al Puerto. Para ello, únicamente se precisa la supresión de la valla que separa al recinto, prevista también en los planteamientos de la Autoridad Portuaria. La idea se completa con el traslado de los puestos de flores de la Alameda a la calle peatonal, lo que resolvería la compleja ecuación que se les plantea a los negocios con el inicio de las obras del Metro. El resultado sería una suerte de rambla provista de manifestaciones artísticas, en la que se podría instalar una salida para los cruceristas, que desembarcarían a pocos metros de un distrito cultural.

Galerías en planta baja

El proyecto pretende completar la oferta cultural del barrio, edificada mediante la actividad de las salas de exposiciones del CAC, galerías como Javier Marín y Espacio Tres, eL Teatro Alameda y el Archivo Municipal. Una de sus iniciativas más atractivas es la creación de estudios de jóvenes artistas en los bajos desocupados del barrio. Los promotores del Soho ya han contactado con inmobiliarias para facilitar la propuesta, que contará con la criba de los responsables del CAC y de las galerías para la selección de obras y creadores. Asimismo, se plantean exposiciones al aire libre de los alumnos de Bellas Artes y espectáculos callejeros. El programa del Soho incluye la promoción de la música clásica, el jazz y el flamenco y la concesión de licencias para música en puntos estratégicos y poco molestos para sustituir el movimiento nocturno por ocio de calidad. También se proyecta un café-concierto cultural en el que se incluirían recitales de flamenco para atraer al turismo.

Conexión con proyectos

La idea del Soho es favorecer el tránsito de cruceristas a través de una oferta cultural y gastronómica moderna y con identidad, aprovechando el potencial de los negocios ubicados en la zona. En este sentido, se prevén acciones de promoción conjuntas en hostelería y turismo.

Los precursores del proyecto están convencidos de que el distrito cultural serviría para relanzar la oferta residencial, actualmente ralentizada a pesar de los atractivos del barrio, que, dispone, recuerdan de equipamientos como centro de salud, colegios públicos, farmacias y supermercados. Además, la zona disfruta de buenas comunicaciones, con quince cabeceras de autobuses urbanos, la estación interurbana y el Puerto, donde se plantean proyectos como el Palmeral de las Sorpresas, en conexión casi directa con la situación del futuro Soho. También existe una planta hotelera compuesta por siete establecimientos de diferente categoría.