El secretario general del PP de Málaga, Francisco Salado, pidió ayer a la Junta que limpie las aguas de las playas malagueñas, algo que le corresponde al gobierno autonómico según la Ley de Aguas, y exigió un plan integral de playas que se inicie en Semana Santa y cuyos gastos sean cubiertos en su totalidad por la Consejería de Medio Ambiente.

Según Salado, la Junta ha empezado este año «mal y tarde» la limpieza de la costa, que arrancó el 28 de junio, cuando anteriormente se hacía desde el 1 de junio. Además, señaló que las embarcaciones dedicadas a limpiar el agua se han reducido de 24 a 15 y añadió que se ha recortado también el personal destinado a este fin.

Para el secretario general de los populares malagueños, la Junta «reivindica y luego no cumple sus obligaciones» y recordó que este año ya se han registrado plagas de microalgas que han teñido de rojo y naranja las aguas del litoral malagueño.

Por todo esto, considera que el Ejecutivo regional está maltratando «nuestro mejor patrimonio y nuestro mejor exponente del turismo». «No se pueden hacer más agresiones al turismo por parte de la Junta», sentenció.

Salado animó a fijarse y tomar como modelos los planes de playas de la Comunidad Valenciana y Cataluña. En estas comunidades existen avionetas que sobrevuelan a primera hora del día todo el litoral y dan órdenes a los barcos para intervenir las manchas de sólidos en el agua y evitar que éstas lleguen a los bañistas. «Tenemos que envidiar este sistema», aseguró ayer Salado.

«Irresponsabilidad inaudita»

Por su parte, la delegada provincial del Gobierno andaluz, María Gámez, consideró «falsedades» las manifestaciones de los populares y recordó que tanto el mantenimiento de las playas como la limpieza de las mismas corresponde a los ayuntamientos.

Gámez señaló que la Junta tiene firmados convenios con las Mancomunidades de la Costa del Sol Occidental y Oriental, así como con el Ayuntamiento de Málaga, para la limpieza del litoral, en los que el Gobierno andaluz aporta el 60 por ciento y el resto lo pagan las instituciones municipales.

Para la delegada, es una «irresponsabilidad inaudita» que el PP diga que las playas están mal y ataque al turismo de forma gratuita.