Sensibilizar y concienciar a la gente para prevenir esta enfermedad es el punto de partida y una de las labores de estos profesionales.

¿Cree que realmente existe una mayor concienciación entre la población?

La gente está más sensibilizada que antes, pero aún queda mucho por hacer. Por ejemplo, cuando te acercas a pie de playa, ves que los niños pequeños están fotoprotegidos, pero en cambio te encuentras con que sus padres no lo están. Por lo tanto, algo estamos haciendo bien, pero aún nos falta por llegar a algunas personas. La campaña de concienciación debería comenzarse en los colegios.

La recomendación principal es no quemarse, pero para que esto no ocurra, ¿qué hacer?

Lo fundamental es evitar la exposición al sol en las horas más fuertes del día, que es entre las 12.00 y las 16.00 aproximadamente. Cuando nos expongamos, la fotoprotección es fundamental, ya que siempre se debe usar el factor adecuado según el tipo de piel de cada persona, pero nunca debe ser menor de 25. Para esto, es recomendable acudir a un dermatólogo o farmacéutico que aconseje cuál es el más adecuado. Y, por último, utilizar otras alternativas de protección como son las gorras, las gafas de sol, las sombrillas, prendas adecuadas.

¿Cómo es la vida de una persona a la que se la ha detectado un cáncer de piel?

Una persona en esta situación pasa a ser paciente de riesgo. En su caso, deben extremar al máximo la protección y pueden hacer una vida totalmente normal siempre y cuando tomen las medidas necesarias que se recomiendan, como el uso de protectores solares muy altos y evitar la exposición directa al sol.

¿Qué otras personas pueden considerarse como pacientes de riesgo?

Los niños pequeños, que podrían ser los más perjudicados porque en la infancia es donde más hay que extremar la protección. También se pueden considerar pacientes de riesgo las personas inmunodeprimidas, por tener una fuerte disminución de la respuesta inmunitaria de un organismo; las personas que tengan la piel clara, y aquellas que trabajen expuestas al sol, como los jardineros, los albañiles o los agricultores.