El ex alcalde de Marbella Julián Muñoz aseguró hoy que firmó los convenios urbanísticos relacionados con la construcción del complejo Malibú, desarrollado a través de operaciones investigadas en una causa, en la que se investiga al actor escocés Sean Connery y a su mujer; aunque precisó que lo hizo "asesorado por los técnicos municipales", según informaron desde las defensas.

El titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Marbella citó hoy a declarar al ex regidor marbellí por la causa iniciada por presuntas irregularidades en varios convenios. Según las fuentes, Muñoz, que entró en los juzgados sobre las 10.00 horas y salió alrededor de las 10.30 horas, "se ha ratificado en su declaración anterior".

Para hoy, el instructor también citó a varios ex ediles, como Rafael González y Marisa Alcalá. Estas diligencias tienen su origen en la investigación de varios convenios urbanísticos, después de que la Fiscalía Anticorrupción presentara una querella al analizar el informe de fiscalización del Tribunal de Cuentas sobre el Consistorio de Marbella.

En esta parte del procedimiento se investiga el convenio suscrito en enero de 2000 por el Ayuntamiento de Marbella, con Julián Muñoz como alcalde accidental, y la sociedad Malibú S.A. por el que se acordó aumentar la edificabilidad de una parcela donde estaba la casa del actor. También se investiga otro convenio con otra empresa sobre una parcela colindante y las licencias concedidas.

El Tribunal de Cuentas estimó que como consecuencia de la determinación de los excesos de aprovechamiento y por la aplicación de precios no ajustados a mercado, el Ayuntamiento marbellí se habría visto perjudicado en 2,7 millones de euros.

Asimismo, en una nueva fase de la instrucción, tras los informes emitidos por el Servicio de Prevención de Blanqueo de Capitales (Sepblac), la Agencia Tributaria y la Sección de Blanqueo de la Policía Nacional, se investigan varias operaciones en las que habrían participado sociedades supuestamente vinculadas al actor escocés y su mujer.

La Agencia Tributaria cifró en 53 millones de euros los beneficios de la explotación de la promoción Malibú, con 72 apartamentos de lujo situado en primera línea de playa, en cuyo desarrollo hay "indicios suficientes que hacen pensar en la comisión de diversos ilícitos penales", algunos ya investigados con anterioridad y otros nuevos como cohecho, contra la Hacienda Pública y blanqueo de capitales, según el informe.

En el documento, al que tuvo acceso Europa Press, se precisa que la promoción se lleva a cabo sobre la base de tres convenios firmados por el Ayuntamiento marbellí, uno con la empresa Malibú SA, "sociedad poseída por el matrimonio Connery para la tenencia de su chalé en la costa, Casa Malibú" --según el juez instructor-- y dos con By the Sea, "en los cuales no se respeta la legalidad vigente".

Asimismo, el juez ha abierto una pieza separada en la que investiga si existe relación del matrimonio con un delito fiscal, en concreto contra la Hacienda Pública, que podría haber alcanzado 1,6 millones de euros.