Uno de los edificios más famosos del mundo apenas fue esbozado en un papel y sólo llegó a convertirse en maqueta. Es el edificio de cristal que Mies van der Rohe ideó para la Friedrichstrasse de Berlín. El arquitecto alemán, con el tiempo, cambió sus aristas por curvas, pero ahí quedó todo y sin embargo, como recuerda el arquitecto malagueño Francisco González, «el edificio está en la Historia de la Arquitectura».

González es el organizador de la exposición La idea dibujada, que hasta finales de octubre ofrece el Colegio de Arquitectos de Málaga en la Sociedad Económica de Amigos del País. Se trata de una muestra de proyectos de Arquitectura que pretende ser bianual para mostrar proyectos con vocación de construirse, archivados, presentados a concurso o de fin de carrera.

Cerca de 80 ideas dibujadas para conocer la creatividad de los arquitectos malagueños o de otros foráneos que hayan ideado proyectos para nuestra provincia.

Como destaca Francisco González, «la construcción de la ciudad es una tarea social en la que intervienen muchos agentes, cuando la coincidencia de intereses es mayor, hay más calidad, por eso hay ciudades míticas como Venecia o Florencia en la que la coincidencia entre mecenas y arquitectos es excelente».

El arquitecto malagueño es de los que considera que los de su profesión «se expresan mejor no tanto mediante la palabra sino por los dibujos», de ahí que crea muy importante la muestra: «Sacamos de los estudios cosas que hemos plasmado, proyectos que sirven de bancos de ideas para nosotros mismos y también para ponerlos delante de la sociedad».

Banco de ideas puede ser la foto más grande de este reportaje, un proyecto de Juan Manuel Sánchez La Chica y Adolfo de la Torre en las cercanías del PTA y que busca aprovechar al máximo la energía solar con la inclinación de la cubierta.

Derroche de imaginación, empezando por una maqueta hecha con botones y lentejas, es el parque proyectado para Madrid por la malagueña Ángela González, que propone una zona verde con nueve espacios y actividades que incluyan una biblioteca natural, competiciones de scalextric y un cine de verano.

También hay curiosidades como un proyecto para la Ciudad de la Justicia de Málaga, de Arquitectos Ayala, consistente en cuatro torres y que además incluía un patio para celebrar las bodas.

Otro de los proyectos que se pueden consultar, esta vez en marcha, es el del Museo del Transporte en el antiguo Campamento Benítez, obra del estudio Carme Pinós, con una estructura muy simple e integrada en la vegetación.

El arquitecto Juan Gavilanes ha ideado por su parte un teatro en Estepona de forma radial, con una única cubierta inclinada que equilibra los cambios de altura un equipamiento de este tipo.

Entre los proyectos más curiosos se encuentra el de Ciro de la Torre para Moucharabay, en Marruecos, muy próximo a la costa, que es una ciudad en miniatura con numerosos patios interiores y vegetación.

Uno de los proyectos fin de carrera más impactantes es el de Francisco Crescini con Criatura habitada, una estructura con forma de piedra lunar que ha situado junto a la nueva zona de rascacielos de Madrid.

El arte y la creatividad llegan a cotas muy altas en las dos salas de la Sociedad Económica de Amigos del País, un banco de ideas para las ciudades del futuro. Hasta el 29 de octubre.