La ciudad se ha ampliado hacia el mar con la incorporación del palmeral del muelle 2, que ayer por la tarde se abrió oficialmente a los malagueños. Y los malagueños respondieron acudiendo a pasear, por primera vez, por un nuevo parque situado a apenas unos metros del Centro Histórico.

La consejera de Obras Públicas, Josefina Cruz, fue la encargada de inaugurar oficialmente una actuación que ha supuesto un desembolso de 32,15 millones de euros y cuatro años de obras en lo que ha sido «un proceso largo, casi tortuoso, complejo, difícil, en el que parecía que todo se había aliado contra el palmeral», en palabras del presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Linde, quien demostró un amplio dominio de los adjetivos catastróficos para recordar la construcción del palmeral.

La complejidad de este proyecto fue también recordada por el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, quien reconoció que «la espera ha valido la pena porque tenemos un espacio de alta calidad» y afirmó: «La Consejería ha estado a la altura de las circunstancias, con un esfuerzo que ha costado más de lo previsto».

En el aire quedaba el futuro de la verja. Tanto la consejera como el alcalde se mostraron dispuestos a abrir nuevos accesos que conecten el muelle 2 con el Parque. Josefina Cruz adelantó que ya están trabajando para habilitar dos, aunque queda en manos del Ayuntamiento que se pongan los semáforos para facilitar el paso de los peatones a través del paseo de los Curas.

Sobre los edificios que hay en el muelle 2, la consejera adelantó que en breve se cederá uno de ellos al puerto de Málaga para que habilite una estación marítima. Además, ya han sacado a concurso la explotación de los dos edificios para cafeterías y están en conversaciones con el Aula del Mar para la cesión de los otros dos inmuebles. No obstante, apuntó que se tendrá que hacer mediante un proceso de concesión pública «al que pueden presentarse otras ofertas».

Más allá de las declaraciones políticas y el ambiente preelectoral, la inauguración del palmeral se vivió en un ambiente relajado, con un satisfecho arquitecto Jerónimo Junquera. También se contó con la asistencia de numerosos concejales del Ayuntamiento y delegados de la Junta de Andalucía. Por los primeros estuvieron Mariví Romero, Julio Andrade, Juan Ramón Casero, Raúl López, Luis Navajas, Rafael Granados y Begoña Medina, entre otros. Por parte de la Administración autonómica estuvieron la delegada del Gobierno, María Gámez, y los de Obras Públicas, Enrique Benítez; Medio Ambiente, Remedios Martel, y Hacienda, Rafael Fuentes.

La Universidad también estuvo representada, en concreto con la rectora, Adelaida de la Calle, y los profesores José Damián Ruiz Sinoga, Vicente Granados y José Sánchez Maldonado. No faltó una amplia presencia de asociaciones, como las de vecinos Centro Antiguo y Campanillas –María José Soria y Carmela Fernández–; el presidente de la asociación de quiosqueros, Jerónimo Núñez; y de la Federación de Peñas, Jesús González, entre otros.