El Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Málaga ya está más cerca de su aprobación definitiva, después de que este martes se haya dado el visto bueno, en una sesión extraordinaria y urgente de la Comisión de Pleno de Ordenación del Territorio y Vivienda, a las últimas correcciones planteadas por la Junta de Andalucía, un punto que ha recibido los votos a favor del equipo de gobierno del PP y del PSOE y en contra de IU.

El siguiente paso será la aprobación definitiva de estas subsanaciones en el pleno extraordinario convocado para este viernes en el Ayuntamiento de Málaga, donde la coalición seguirá votando en contra y el PSOE se abstendrá, tal y como han anunciado. Tras ello, la documentación se remitirá a la Dirección General de Urbanismo para la publicación del PGOU en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) y su consiguiente entrada en vigor.

"Esperamos que se cumpla el plazo de 48 horas para su publicación dado por la delegada provincial del Gobierno andaluz, Remedios Martel", ha afirmado a los periodistas el delegado municipal de Ordenación del Territorio y Vivienda, Diego Maldonado.

Maldonado ha recordado que son ya siete años de trámites: "una andadura que ha sido excesivamente larga y tortuosa, en la que han existido obstáculos que se podían haber evitado y que han provocado retrasos que no deberían haber existido". "Pero, al fin y al cabo, lo importante es que tenemos un instrumento para generar riqueza y empleo y un dibujo de la ciudad", ha declarado.

CONVENIOS URBANÍSTICOS

Preguntado por los convenios urbanísticos firmados para las nuevas centralidades de Martiricos, La Térmica y Repsol, el delegado municipal ha indicado que están teniendo reuniones para "acercar posturas" ante la difícil situación económica actual.

En este sentido, Maldonado, que ha precisado que a partir de la entrada en vigor del nuevo PGOU el Ayuntamiento dispondrá de forma efectiva de 25 millones de euros, ha insistido en que el Consistorio está dispuesto a ser flexible, "con una cierta lógica", en cuanto a los tiempos de pago, pero "sin tocar el contenido económico de los convenios porque es dinero público, que es de todos".

"No hemos recibido ninguna petición distorsionada y al final todos tendremos que ceder un poco en lo que se pueda, que en nuestro caso son los plazos y mantenernos firmes en lo que respecta al dinero", ha subrayado. Por ello, ha confiado en que "todo se arregle".