Unos llegaban con el cansancio propio de un final de vacaciones que les traía de los Países Bajos. Otros comenzaban su merecido descanso en el corazón de la Costa del Sol. Dos estados de ánimo opuestos que compartieron la misma piedra en el mismo punto del camino. Éste se truncó para todos en el aeropuerto de Málaga en un extraño suceso.

Los hechos se remontan a la noche del pasado lunes. Sobre las 23.30 horas, un particular se puso en contacto telefónico con la Policía Nacional de Málaga a través del 091 para dar a conocer una situación poco menos que rocambolesca. El requirente aseguraba desde su teléfono móvil que tanto él como el resto del pasaje de un vuelo procedente de la ciudad holandesa de Eindhoven se había quedado incomunicado en una zona del aeropuerto de Málaga después de desembarcar del avión de la compañía de bajo coste Ryanair.

Según la versión que esta persona ofreció a la policía, los pasajeros no podían avanzar hacia la salida de la terminal porque todos los accesos con los que se toparon estaban cerrados y sin ningún tipo de personal que les atendiera.

Sin control fronterizo

Así lo confirmaron ayer fuentes policiales a este periódico, quienes además añadieron que se trataba de un vuelo que se ajustaba al «espacio Schengen», un protocolo por el que el pasaje de la nave no requiere control fronterizo de entrada por el acuerdo existente entre el país de salida y el de destino del avión. Según las mismas fuentes, la Policía Nacional se puso inmediatamente en contacto con las autoridades aeroportuarias, quienes se hicieron cargo de localizar y habilitar la salida de todos los pasajeros.

Fuentes de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) aseguraron ayer a La Opinión de Málaga que el retraso fue de unos veinte minutos máximo por la ausencia de uno de los empleados de la compañía, encargado de abrir las puertas correspondientes. Sobre las 23.40 el incidente, que las fuentes consultadas tildaron de anecdótico, se había resuelto. Desde Ryanair, al Departamento de Comunicación de la aerolínea no le constaba ninguna incidencia en ninguno de los vuelos en los que sus aviones hicieron escala en Málaga esa jornada.