Puede parecer un lugar idílico que permite disfrutar como pocos de la tranquilidad que aporta el mar. Sin embargo, la sensación de pisar un terreno que carece de cuidados básicos de mantenimiento preocupa cada vez más a los vecinos de la zona, quienes lamentan el estado de abandono en que se encuentra la playa de El Peñón del Cuervo, deteriorada en los últimos años por el «uso irresponsable» que los ciudadanos hacen de su entorno.

«La suciedad permanece acumulada junto a los restos de quema en gran parte de la playa. Cuatro papeleras no son suficientes para la cantidad de gente que visita la zona», denuncia el presidente de la asociación de vecinos de El Palo, Santiago González, quien exige al Ayuntamiento que proceda a la retirada de la basura esparcida y que incorpore medios suficientes para que pueda ser arrojada por los ciudadanos.

Papeles, botellas, plásticos, restos de comida y deshechos de barbacoas, todos ellos entremezclados con plantas pisoteadas, degradan el paisaje de El Peñón del Cuervo. «Aquello es un desorden», expresa el presidente de la asociación de vecinos de La Araña, José Santos, que pide la rehabilitación inmediata de este espacio público.

La ordenanza de uso y disfrute de las playas del término municipal de Málaga prohíbe las acampadas en estas zonas. Los campistas ilegales, sin embargo, parecen hacer oídos sordos a la normativa, ya que, con frecuencia, se adueñan del terreno, lo que genera «montañas de basura».

Como si de un camping se tratara, muchos extranjeros, instalan sus tiendas de campaña en la la playa dispuestos a alojarse varios días, mientras que otros se atreven incluso a permanecer todo el verano con «barbacoas ilegales», que, a juicio de Santos, deben eliminarse, dado que «provocan la invasión de ocupantes». Una actuación en la que, según la edil de Medio Ambiente, Ana Navarro, debe intervenir la Concejalía de Seguridad «para poner orden y levantar las acampadas».

Otra de las actitudes que atenta contra la legislación es la que se refiere a los perros. A pesar de que la normativa prohíbe la circulación y estancia de animales de compañía en las playas y piscinas públicas, es muy habitual verlos pasear con sus dueños por dichos espacios. «Los bañistas incurren en este error porque nadie se lo impide», señaló Santos, que también alertó de la existencia de zonas inundadas en el Peñón del Cuervo, puesto que los viandantes «se dedican a abrir las llaves de paso, lo que provoca un enorme despilfarro de agua».

La necesidad de dotar esta área natural de más sistemas de vigilancia es también una reivindicación de los vecinos. «Nuestra playa está totalmente abandonada. Debería haber más presencia policial, para corregir, al menos, las ilegalidades que se cometen», subrayó el portavoz de La Araña.

El presidente del colectivo de vecinos de El Palo criticó la «pasividad» del Consistorio, al que califica de «irresponsable» por «no educar a la ciudadanía para que cumpla la normativa vigente».

Aunque la asociación recordó que ha presentado al Ayuntamiento varios escritos y propuestas y no ha obtenido respuesta, Ana Navarro recalcó que no tenía constancia de estas quejas, aunque matizó que debe ser la concejala del distrito Málaga Este, Carmen Casero, quien se las haga llegar.