El grupo socialista en el Ayuntamiento de Málaga ha afirmado este martes que el alcalde, Francisco de la Torre, "recoge ahora la herencia de un urbanismo diseñado por su equipo de gobierno basado exclusivamente en una especulación urbanística sujeta a una serie de convenios urbanísticos que se vienen abajo uno tras otro", y ha puesto como ejemplo "los casos de La Térmica, Repsol o Martiricos, que arruinan el período 2011-2015 antes de empezarlo".
La portavoz socialista en el Ayuntamiento, María Gámez, ha señalado que el interés general de la ciudad se verá afectado por unas operaciones económicas "mal gestionadas" por el PP, con las que "no se han aportado nada al futuro de la ciudad que la posicione en mejores condiciones de competitividad y productividad, vendiendo en los últimos siete años de gobierno más patrimonio municipal de suelo que en toda la historia de Málaga".
Gámez ha apuntado a través de un comunicado que los malagueños "tendrán que pagar los largos procesos judiciales a los que deberá hacer frente el Ayuntamiento para defender unos convenios urbanísticos que no han sido bien negociados ni gestionados, y de los que ahora somos prisioneros", ha agregado.
Asimismo, ha resaltado una vez más la "irresponsabilidad" del equipo de gobierno del PP "de supeditar el nivel de inversión de los presupuestos de 2011 al desarrollo de los convenios urbanísticos del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU)", ya que "existía un alto riesgo el hecho de considerar como reales unos ingresos que se pueden ver afectados, entre otras circunstancias, por la evolución del mercado respecto a la crisis o a la voluntad de los firmantes del convenio, tal y como hemos podido comprobar".
Privatización
Por otro lado, la portavoz socialista en el Ayuntamiento ha criticado que De la Torre "haya iniciado una apresurada carrera hacia la privatización de los servicios municipales", ante "la imposibilidad", ha dicho, "de hacer efectivos los ingresos por los convenios urbanísticos firmados, y ante la necesidad de hacer caja por la mala gestión que han realizado en la ciudad".
Al respecto, ha destacado el intento por parte del equipo de gobierno de privatizar la empresa pública Emasa y el posterior anuncio, una vez que no lo ha conseguido, de posibilitar la entrada de capital privado en Parcemasa, "con el único objetivo de sanear las arcas municipales que soportan una deuda de más de 735 millones de euros".
"Desde el grupo municipal socialista nos preocupa las constantes políticas de privatización de los servicios del Ayuntamiento que pueden repercutir en la calidad de atención a la ciudadanía al escapar al control municipal, como ya pasó con la empresa Limasa III", ha afirmado, y ha condenado esta práctica que, "junto al urbanismo especulativo, se convierte en las dos caras de una misma moneda", ha concluido.
