El dicho popular dice que «un diamante es para siempre». El problema de Málaga es que nunca ha llegado a disponer de la colección de gemas que Royal Collections se comprometió a exponer en la ciudad durante 10 años. La más importante muestra del mundo, con 150.000 quilates, se ha quedado en una mera promesa incumplida y los tribunales se han convertido en la única vía para poner orden en este proyecto, que en seis años ha pasado de ser la estrella de la política cultural municipal a convertirse en un problema.

Royal Collections

De Valencia a Málaga

El Ayuntamiento de Málaga conoció Royal Collections gracias al consistorio valenciano, con quien tenía fuertes lazos y le abrió las puertas para negociar su traslado. Su colección de gemas había estado expuesta en la Ciudad de las Ciencias de la capital levantina varios años, aunque su estancia no estuvo exenta de algunos problemas. Denunció a la Ciudad de las Ciencias -una vez que se fueron de allí en 2007- por tener en las salas de exposición una temperatura y una luz que no beneficiaban a las gemas. Pero la puntilla fue el intento de recalificación de una zona verde para construir el museo de las gemas, lo que levantó cierta polvareda y Málaga aprovechó para firmar un acuerdo en 2006 para que se instalara en la capital. Era un momento en que el Ayuntamiento defendía la apertura de una red de museos, quizá sin criterio, para reforzar la oferta turística.

El contratoEl canon y las obrasEl contrato

El contrato firmado en 2006 establecía un canon a pagar por el Ayuntamiento de Málaga a Royal Collections de 8,3 millones de euros para poner en marcha el museo. Hasta 2011 se abonaron unos 5 millones de euros. Además, el Consistorio asumía la rehabilitación del edificio de Tabacalera, donde se instalaría el complejo de museos de Art Natura, que incluía la exposición de gemas, obras de arte y dos museos divulgativos y de corte familiar: Ciencias de la Vida y Ciencias de la Tierra.

RetrasosProblemas en la rehabilitaciónRetrasos

El arreglo del edificio, que se propuso abrir en 2008, tuvo muchos problemas. La primera adjudicataria -Graman- quebró y hubo que hacer un nuevo proceso. La obra recayó en Ferrovial, que modificó el proyecto por problemas en el cimiento del edificio. Los costes se dispararon y los plazos se dilataron. El coste de toda la actuación en Tabacalera, incluidas las dependencias municipales y el Museo del Automóvil que sí está abierto, se elevó a unos 40 millones de euros. De estos, 24,5 millones corresponde a la recuperación de los pabellones de Art Natura.

ProblemasDesencuentros y cambiosProblemas

Los desencuentros entre el Ayuntamiento y Royal Collections surgieron casi desde el principio. El Consistorio argumenta que el presidente de Royal Collections, Fulgencio Alcaraz, reclamó constantes cambios en el proyecto durante los trabajos, añadiendo actuaciones nuevas y modificaciones que retrasaron la obra. Alcaraz dice lo contrario, que plantearon 164 notificaciones «para ahorrar gastos innecesarios o que no se cobrara dos veces lo mismo». Además, los retrasos hacen que la crisis llegue con la obra en marcha y el problema se agrava. Sigue sin haber fecha para la inauguración y el proceso de selección de personal, iniciado a finales de 2010, se paraliza en enero.

UltimátumDenuncias y plazoUltimátum

La primera parte del año fue para desmantelar la estructura que mantenía Art Natura, reclamar al Consistorio que asuma las pérdidas del museo cuando abra y 1,4 millones de euros más en concepto de indemnización por los retrasos acumulados. Tras unos intentos del nuevo concejal de Cultura, Damián Caneda, para reconducir el proyecto, el Ayuntamiento rompe la baraja. El 16 de septiembre aprueba un plazo de 120 días para que Art Natura abra sus puertas.

SeguridadEl juez toma la palabraSeguridad

Art Natura mantiene el pulso y dice que es imposible abrir el museo porque no cumple las medidas de seguridad y exige al Ayuntamiento que acometa la instalación de puertas de seguridad y reformen algunos cerramientos. De forma paralela, presenta una demanda en el juzgado de instrucción número 3 para que suspenda de forma cautelar el plazo de 120 días. Mientras espera la resolución judicial, se niega a recepcionar un edificio que considera incompleto y el museo se queda en el aire. El auto con la resolución llegó el 12 de enero con la negativa a suspender el plazo. El juez insiste en que, tras más de 20 millones invertidos y 5 millones de canon recibidos, no se puede decir que la apertura sea imposible de cumplir. En cinco días, Art Natura tiene que improvisar la inauguración para cumplir el plazo y evitar que se le rescinda el contrato.

SurrealismoLa apertura en falsoSurrealismo

Durante los últimos días hemos asistido a una inauguración sin muestra, sin licencia y sin sentido. Era la única forma que tenía Art Natura de justificar que habían intentado cumplir el contrato, aunque en los cuatro meses anteriores no realizó ninguna actuación en este sentido. Esta semana termina con el inicio del expediente de rescisión del contrato por parte del Ayuntamiento y el comienzo del camino judicial, con resultado y plazo incierto. Lo único que parece claro es que el museo de las gemas es un gran fiasco y que Tabacalera tendrá otros usos culturales más felices.