La Sección Primera de la Audiencia de Málaga ha tenido que suspender el juicio previsto para este lunes contra un hombre y una mujer, acusados del secuestro de una mujer y su hija de cinco años de edad en 2009, al renunciar el procesado a su abogado. Inicialmente, la vista oral se ha vuelto a fijar para el próximo lunes día 12 de marzo.
El acusado, que se encuentra en prisión, ha informado al comienzo de la sesión de que deseaba renunciar a su abogada de oficio en favor de un letrado privado, cambio que se produjo a finales de la pasada semana, por lo que no pudo avisar al Tribunal, cuya presidenta ha advertido al procesado de que no deberán producirse más dilaciones en el enjuiciamiento.
La Fiscalía solicita en total para los dos acusados la pena de 43 años y ocho meses de prisión. Los hechos sucedieron en marzo de 2009 y, según las conclusiones provisionales de la acusación pública a las que tuvo acceso Europa Press, ambos acusados, extranjeros, junto con una tercera persona no identificada, planearon el secuestro.
Para ello, el fiscal sostiene que treparon por el muro protector de la puerta de vehículos de la vivienda, ubicada en una urbanización de la localidad malagueña de Estepona; y serraron algunos barrotes de una ventana, hasta lograr entrar. Una vez dentro, "retuvieron sin su consentimiento" a la mujer, a la que "maniataron y taparon los ojos en el sótano", según el escrito de acusación.
Asimismo, indica el ministerio público, supuestamente para amedrentar a la víctima utilizaron un arma y todo mientras que la niña de ésta de cinco años de edad dormía en su habitación. Al día siguiente, la pequeña fue trasladada a la casa de la acusada, se señala, ubicada en el núcleo poblacional de Sabinillas, donde estuvo custodiada por ésta.
Mientras, la madre permaneció retenida por el acusado en distintos lugares, según sostiene la Fiscalía inicialmente, hasta que ambas fueron finalmente liberadas dos días después. En este tiempo, el procesado, dice el fiscal, llamó al marido y padre de las dos retenidas exigiendo dos millones de euros para ponerlas en libertad y no atentar contra sus vidas.
Además, el hombre supuestamente aprovechó la "situación de temor" de la mujer para que le diera una tarjeta de crédito, de la que al parecer extrajo 2.100 euros. Durante estos hechos, los acusados tenían un arma sin la correspondiente licencia, según mantiene el ministerio público en su calificación provisional.
Para la Fiscalía, se trata de dos delitos de secuestro, uno en concurso con allanamiento de morada; otro de tenencia ilícita de armas y uno de robo con intimidación, en concurso con estafa, que sólo achaca al procesado. En total, para él pide la pena de 24 años y dos meses de prisión y 2.100 euros de indemnización; y para ella, 19 años y medio.
