La Policía Nacional ha detenido al dueño y a un empleado de una empresa de desguace por posible estafa y falsedad documental, ya que, al parecer, vendían las motocicletas que tenían que destruir, viéndose perjudicados por tal fraude tanto concesionarios de motos como particulares.

Las pesquisas policiales dieron comienzo cuando una entidad concesionaria de una marca de motocicletas presentó una denuncia, ante la imposibilidad de recibir las subvenciones del denominado 'Plan E', para la renovación del parque automovilístico de este tipo de vehículos, según han explicado desde la Policía Nacional.

Los investigadores, tras coordinar las gestiones policiales con la Jefatura Provincial de Tráfico y la Delegación Provincial de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, averiguaron la ubicación de la empresa responsable de esta actividad ilícita, homologada para el desguace de vehículos y tramitación de la baja definitiva del permiso de circulación correspondiente a la placa de matrícula.

Posteriormente, los agentes procedieron a la entrada y registro en el recinto localizado, en el que se intervinieron cuatro motocicletas que estaban preparadas para la venta y que, con anterioridad, los titulares habían entregado para su destrucción.

Además, también se intervino abundante documentación, mediante la que se ha podido determinar que habían falsificado los certificados de desguace, así como la necesaria baja del permiso de circulación y manipulación de certificaciones auténticas para, de esta forma, poder vulnerar los controles previstos para este tipo de actividad.

Mediante este 'modus operandi' no sólo resultaban lesionados los intereses de las concesionarias, que no han podido recibir las subvenciones previstas, sino que muchos particulares se han encontrado que no han causado baja en los censos correspondientes y, por lo tanto, han tenido que abonar el pago del Impuesto de Circulación de los vehículos que entregaron para su destrucción, señalan las mismas fuentes en un comunicado.

Las investigaciones para averiguar el montante económico total de la estafa, así como la posible implicación de otras personas en los hechos continúan abiertas. La operación ha sido realizada por agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta de la Comisaría Provincial de Málaga.