Málaga sigue apostando por cambiar el proyecto del Corredor Mediterráneo y defiende el trazado litoral por Andalucía, que conectaría Almería y Algeciras con la ciudad como eje central. Esto se puso ayer de manifiesto en la reunión mantenida entre el Ayuntamiento malagueño y la entidad Ferrmed, que actúa como lobby para apoyar este proyecto en la Unión Europea (UE).
El encuentro sirvió para dar a conocer el estudio previo con el que quieren avalar la postura de un trazado litoral ante Bruselas. El coste rondará los 7.500 millones de euros y presenta algunas ventajas respecto al recorrido propuesto por el Ministerio de Fomento en noviembre a la UE, cuando apostó por un itinerario por el interior de Andalucía (Almería-Granada-Antequera-Sevilla).
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, destacó la importancia de conectar por tren todo el litoral mediterráneo español, lo que aumentará su atractivo para que sus puertos capten los grandes tráficos de mercancías con Asia. En este punto, insistió en que Málaga debe estar conectada por el litoral con el resto del Corredor, que continúa paralelo a la costa levantina y catalana hasta Francia.
De la Torre afirmó que el coste es similar entre el trazado interior y litoral de Andalucía, pero con la ventaja añadida de que el recorrido paralelo por la costa no tendría pendientes tan pronunciadas como el interior –«que tiene que ascender hasta 1.000 metros por encima del mar», apuntó– y eso facilita el tránsito de grandes trenes de mercancías.
El Corredor Mediterráneo tiene una doble función, ya que el proyecto consiste en la construcción de cuatro vías en ambos sentidos. Dos se destinarían al transporte de mercancías y las otras dos, para el transporte de personas.
El estudio presentado ayer por Ferrmed establece esta doble función en todo el trazado por el litoral, conectando los puertos de Algeciras, Málaga y Motril, además de incluir el nodo de transporte del aeropuerto de Málaga.
El trazado litoral del Corredor se establecería al norte de los diferentes núcleos residenciales que hay en el litoral, facilitando además conexiones entre estos municipios y este eje ferroviario, ya que el transporte de personas previsto se realizaría con un tren de Alta Velocidad.
Así, como mínimo, establece cinco grandes paradas en su recorrido: Algeciras, Marbella, Málaga, Motril y Almería, aunque deja abierta la inclusión de más estaciones.
Las mayores dificultades estriban en un trazado que incluye diferentes túneles y viaductos para salvar la compleja orografía y urbanismo de la zona.
Lucha política. El PP y el PSOE protagonizaron un nuevo enfrentamiento político, en ese caso con el Corredor Mediterráneo. La diputada nacional del PP Carolina España aseguró que el compromiso de su partido y del Gobierno central está «a años luz» del PSOE, «quienes cuando gobernaban enviaron a Europa una propuesta en la que Málaga quedaba excluida».
El diputado socialista Miguel Ángel Heredia, por su lado, afirmó que los cambios del PP suponen «un golpe mortal al proyecto».
Envía a Fomento un estudio sobre el paso del tren por la ciudad. El Ayuntamiento de Málaga ha puesto sobre la mesa del Ministerio de Fomento toda una serie de propuestas para que defina el futuro enlace férreo entre las líneas de la Costa del Sol Occidental y la Oriental, a su paso por la ciudad. El trabajo fue enviado hace una semana al ministerio con el objetivo de que se planifique cómo se diseñará el trazado del futuro tren litoral, cuyo principal problema de planificación es la entrada en la capital y conectar ambos lados de la costa.
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, explicó que el estudio plantea varias propuestas para el paso del tren litoral de pasajeros, que sería por la parte norte de la ciudad «en paralelo a la ronda». En este sentido, apuntó que la posibilidad de plantear el paso del tren por un túnel que cruce la ciudad, parece «más adecuado para un Cercanías» que para un tren de alta capacidad y velocidad como el se plantea para unir el litoral.
Fuentes municipales señalaron que el estudio ha sido enviado a Fomento para poner sobre la mesa este debate, ya que no se encuentra previsto cómo se puede salvar el paso por la ciudad. «El PEIT (Plan Estratégico de Infraestructuras y Transporte) pinta una línea, pero no define cómo se hará», recalcan desde el Ayuntamiento de Málaga, al tiempo que insisten en que las propuestas municipales van encaminadas para abrir el debate «porque la decisión es del órgano ferroviario competente, pero al menos así son conscientes del problema y de que hay que resolverlo».
La clave se encuentra en cerrar un diseño de las futuras líneas de pasajeros litoral a su paso por la capital, uno de los principales escollos de su trazado.
