Málaga sigue sufriendo en este 2012 una verdadera sangría de empresas que están cayendo en concurso de acreedores al no poder hacer frente a sus deudas, aunque a la vez, se sigue revelando como la provincia líder de Andalucía en cuando a creación de empresas. Según los datos del Radar Empresarial publicado por Axesor, la provincia ha registrado entre enero y mayo un total de 76 quiebras empresariales, lo que supone un 35% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior, que ya fue de por sí el más cruento de la historia reciente.

Como compensación, el estudio de Axesor recuerda que en Málaga se han creado en los cinco primeros meses del año un total de 1.951 nuevas empresas, un 7,6% más que en 2011. Esta cifra es la más alta de toda Andalucía y sólo es superada en España por los casos de Madrid (8.117), Barcelona (5.985), Valencia (2.076) y Alicante (2.061).

El ascenso de las empresas que entran en proceso concursal es un tema ciertamente preocupante pero no inesperado dada la mala coyuntura económica. El abogado y presidente de la Asociación de Expertos en Derecho Financiero y Mercantil de Andalucía (Exfimer), Pablo Franco, ha comentado en varias ocasiones a este periódico que aquellas empresas que en 2008 y 2009 refinanciaron sus deudas con planes de viabilidad a tres o cuatro años pueden verse ahora en la tesitura de tener que volver a plantearse otra nueva refinanciación, dado que la crisis no ha remitido.

«Si no logran refinanciarse se encontrarán en situación de insolvencia. Nadie esperaba una crisis tan larga», insisten en Exfimer. El 94% de las empresas que acaban en concurso de acreedores terminan con la liquidación de sus bienes y su desaparición.

Dinamismo y autoempleo. El contrapunto a esta negativa tendencia es el alto número de empresas creadas, que demuestra el dinamismo empresarial de una provincia donde el sector privado siempre ha sido el que ha tirado de la economía. El presidente de la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM), Javier González de Lara, destacaba hace unos días que la media de empresas malagueñas dadas de alta en la Seguridad Social creció un 6,5% durante el año 2011, superando la barrera de las 51.000 y rompiendo una tendencia a la baja que se inició con la propia crisis.

El hecho de que muchas personas en paro se hayan planteado poner negocios propios para autoemplearse es una de las causas de esta tendencia, que está paliando en parte la altísima mortalidad empresarial de unos tiempos de bajo consumo y de restricción máxima del crédito hipotecario.

En todo caso, la creación neta de empresas es un dato algo artificial y fluctuante, ya que depende siempre del periodo de tiempo que se escoja como medición y la fuente de datos. Por ejemplo, el barómetro de Axesor publicado ayer revela que en los cinco primeros meses de 2012 en Málaga se crearon o reactivaron 2.454 empresas mientras que se produjeron 3.289 bajas oficiales y ceses de actividad. El saldo es pues negativo para Málaga, aunque Axesor usa datos del Registro Mercantil y de la Seguridad Social, que resulta más valioso pues hace referencia a empresas que tienen dados de alta a trabajadores.