El sindicato UGT de Málaga ha cifrando en 2.544 los procesos de maternidad que se han tramitado en la provincia durante el primer trimestre de 2012, de los cuales 40 han sido por el padre y el resto, 2.504 casos, por la madre.
Esta cifra supone un descenso de 6,33 puntos porcentuales con respecto al mismo periodo del año pasado, según ha informado a Europa Press la secretaria de Mujer y Juventud de UGT Málaga, Cristina Alamán.
Ha explicado que esta reducción es "una consecuencia directa del miedo que la reforma laboral ha provocado en las trabajadoras que temen más que nunca quedarse embarazadas ante el miedo a las consecuencias en el trabajo".
En este sentido, Alamán ha apuntado que entre el primer trimestre de 2011 y el primero de este año se ha gastado un 3,29 por ciento menos en prestaciones por maternidad y paternidad, según los últimos datos disponibles del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
En cuanto a los permisos por paternidad, en el primer trimestre de 2012 Andalucía ha sido la tercera Comunidad Autónoma --tras Cataluña y Madrid-- en este tipo de prestación. En el caso concreto de Málaga, el total de permisos concedidos durante este periodo han sido 2.023.
CUIDADOS DE FAMILIARES
La sindicalista también se ha referido a las excedencias por cuidados de familiares, de las que se han dado de alta 236 solicitudes durante el primer trimestre de 2012, un 9,23 menos con respecto a las cifras del año anterior. Concretamente, 224 han sido solicitadas por mujeres y 12 por hombres, ha precisado.
Según Alamán, se está "retrocediendo en derechos y en igualdad de condiciones laborales entre hombres y mujeres en el mercado de trabajo, ya que si antes la conciliación de la vida familiar y laboral suponía un gran obstáculo para la mujer en el mercado laboral, ahora con una reforma laboral que da carta libre al empresario sobre derechos ya adquiridos como la lactancia o la reducción de jornada, conciliar se hace aún más difícil", ha planteado.
Además, "en situaciones tan complicadas como las que estamos atravesando", ha subrayado que las mujeres y los jóvenes los son "los más perjudicados". En este sentido, ha afirmado que si las condiciones laborales de estos dos sectores de población "ya dejaban mucho que desear, ahora no sólo pretenden quitarnos lo ya conseguido, sino también derechos básicos".
