Los colegios concertados insisten en que son la solución a los recortes anunciados en Educación. Que su existencia sirve para que la Administración ahorre, ya que una plaza escolar en uno de estos centros cuesta la mitad que en uno público. Además está la demanda social, que supera a la oferta. Según Ramón Seco, presidente de la patronal de la concertada en Málaga, estos colegios querrían atender toda la lista de espera, pero la Junta ha tomado la decisión política de no ampliar sus plazas. «Sólo nos toleran», asegura.

¿Cuántos colegios de la provincia de Málaga son privados concertados?

Los centros concertados de la provincia de Málaga se integran en tres patronales. CECE Málaga, que es la que yo presido, cuanta con 60, incluidas las escuelas de Educación Infantil. También está la patronal religiosa, que tiene aproximadamente el mismo número de colegios e institutos. Y por último están las cooperativas, que son menos numerosas; se trata de centros pequeños que pertenecen a otras patronales.

¿Es un porcentaje similar a la media española o andaluza?

Lo que pasa en Andalucía se puede resumir perfectamente en las palabras que dijo la consejera Mar Moreno al tomar posesión de su cargo: prometió en el Consejo Escolar autonómico que iba a establecer un límite por el que la enseñanza privada concertada no podría superar el 20%. Es decir, el 80% de los puestos escolares andaluces son públicos, y el 20% restante, concertados. Así que la Junta promociona la enseñanza pública en contra de la gran demanda social que existe por la concertada. Y además lo hace en época de crisis económica, con la que está cayendo, cuando está absolutamente demostrado que la enseñanza concertada es más barata. Esto en el resto del Estado no ocurre. En Madrid, por ejemplo, la mitad de las escuelas son públicas y la otra mitad concertada.

¿Qué distingue a la educación privada de la pública?

Nuestros resultados son mejores. El cien por cien de nuestros alumnos aprueban la Selectividad. Este año, en el colegio Maravillas tenemos la gran satisfacción de contar con el alumno con mejores notas de su promoción en Málaga. Esto da un enorme prestigio al centro. Es un motivo de gran alegría para los profesores que le hemos dado clase, porque es un alumno al que queremos mucho. Es una gran persona y un gran compañero. Solidario y brillante. Y gran deportista.

Si la demanda supera ampliamente a la oferta cada vez que se inicia un proceso de escolarización, ¿por qué la Junta se empeña en no aumentar las plazas de la concertada?

Creo que es un problema político. En Andalucía se ha apostado por educación pública y a la concertada sólo nos toleran. La coalición de izquierdas en Andalucía lo ha ratificado y así llevan 30 años. Nos soportan, como si fuéramos un matrimonio mal avenido. En este caso, nosotros seríamos el esposo que no tiene dinero. Si no tuviéramos una mejores resultados, no existiríamos porque no podríamos competir con la enseñanza gratuita. Si la enseñanza pública funcionara bien, no tendría sentido la privada. No tendríamos más remedio que reconvertirnos.

¿Hay poca escuela privada en Andalucía?

No sé si será poco o mucho. En Dinamarca no hay apenas escuela privada. El problema en Andalucía es la demanda social.

¿Si el PP hubiera ganado las últimas elecciones autonómicas, cambiaría ese porcentaje?

Con el PP no habría porcentajes. El cambio sería lento. Seguramente había más demanda para hacer centros concertados y seguramente así habría más recursos para la enseñanza pública. Y con esto no apoyo una ninguna opción política sobre otra. Pero creo que el primer paso sería no establecer límites que son artificiales. Sobre todo en época de crisis. Los gastos en educación son superiores, cuantitativamente a cualquier otro servicio público. La enseñanza en Andalucía es mucho más cara por ser mayoritariamente pública. La escuela concertada ahorra la mitad del presupuesto por alumno a la Junta. La Consejería de Educación destina una partida media de 5.352 euros por cada escolar de la pública al año, mientras que con los conciertos invierte 2.395 euros. Cuando la Administración firma un concierto con un colegio lo hace porque le interesa. Así que si no existiera la limitación del 20% la Junta tendría muchísimos más recursos para la enseñanza pública, que estaría mejor, no habría tantas discusiones y los ciudadanos no tendrían que pagar una educación tan cara.

¿Qué podría emular la enseñanza pública de la privada?

El camino pasaría por modificar la enseñanza pública hacia un modelo más europeo. Que la organización sea distinta, más ágil. Que los centros gocen de una mayor autonomía para contratar a profesores y adquirir recursos externos. Un centro concertado en Andalucía se parece más a un centro público de Finlandia o Dinamarca que uno público andaluz.

¿Por qué los padres prefieren la concertada para sus hijos?

Hay una percepción social de que hay una mayor calidad en los centros concertados. Y es algo notorio. Además, se produce la concatenación de tres factores, que considero determinantes. En primer lugar, los centros privados tienen un ideario determinado y muchos padres lo buscan. Esto se ve claramente en los religiosos pero también los laicos. Otra razón es que, la mayoría, somos centros integrados, es decir, los padres pueden enviar a sus hijos al colegio con tres años y saben que podrá salir con 18 para ir a la Universidad. Esto hace que estén más tranquilos y que las transiciones sean más fáciles, ya que el ambiente es familiar, donde los niños conocen el movimiento interno. Y por último, los concertados tienen una mayor flexibilidad en la organización de sus recursos humanos y económicos. Es decir, somos una empresa y funcionamos con una empresa, adaptando los recursos a las circunstancias para subsistir, primando la excelencia. Esto hace que seamos más competitivos.

¿Cómo es la implicación de las familias en la educación de sus hijos en la escuela privada?

La relación con las familias de los alumnos es muy buena. Es mucho mayor que en la pública, por su puesto. Salvo casos aislados, cuando convocamos a una tutoría, los padres acuden inmediatamente al colegio.

¿No se registran tensiones con los padres? ¿No hay agresiones ni episodios que alteren la convivencia?

Las tensiones las típicas de los padres, que son muy subjetivos. Hoy en día es generalizado el sobreproteccionismo de las familias. Si hay algún episodio, es esporádico. Nada significativo.

¿Ustedes en CECE defienden la libre elección de centro? ¿Qué criterios utilizarían entonces para conceder plazas si éstas son tan limitadas?

Defendemos la libertad de los padres de poder elegir la educación que quieren para sus hijos. Cambiaríamos, sin duda, los criterios actuales de baremación, que se basan en la cercanía o lejanía del domicilio. El primero, sin duda, sería si ya se tienen hermanos en el centro. Y en segundo lugar, que la familia acepte el ideario del centro. Como supongo que eso no bastaría, habría que conseguir una mayor variedad y libertad de elección de los padres. En el caso de la escuela pública, también hay unos colegios que son más demandados que otros. Apostaría por la especialización. Miraría a Europa en lugar de enfrascarnos tanto en discusiones políticas.

¿Qué espera de la reforma que empieza a negociar el Gobierno?

Creo que es necesario reformar completamente la LOGSE o lo que queda de ella, porque ha demostrado ser un desastre desde el punto de vista de los resultados. Es necesario hacer una reforma en profundidad de la enseñanza. La reforma de Wert no es más que una reforma muy parcial en diferentes aspectos que funcionan muy mal. ¿Aumentar las horas de las asignaturas instrumentales? Lo veo muy bien. Pienso que la Lengua Castellana tendría que darse a diario. Matemáticas e Inglés, si no cinco horas a la semana, al menos cuatro. Y hay optativas que deberían ser realmente optativas. Lo principal es que un alumno sepa leer, comprender lo que lee, tenga razonamiento matemático y al menos, domine una lengua extranjera.

¿Qué opina de que se adelante la edad de elección de itinerario y los alumnos de tercero de ESO puedan optar por hacer FP?

Lo veo bien porque lo que está ocurriendo es que existe el mismo currículum para todos independientemente de la capacidad y el talento de cada alumno. Tenemos un sistema de evaluación que incide en la promoción automática. Los alumnos excelentes no se motivan, porque no ven recompensado ni su trabajo ni su esfuerzo. Y eso es malo para una persona que se está formando para su trabajo futuro.