El delegado del gobierno andaluz en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, ha anunciado que la Junta ha iniciado un plan de inspección en profundidad de las salas, discotecas o recintos de espectáculos cuya capacidad supere las 700 personas y ha pedido a los promotores de fiestas que extremen las medidas de seguridad y la observancia de la normativa vigente.

Ruiz Espejo detalló que el Plan de Inspección bianual en materia de espectáculos públicos y actividades recreativas se desarrollará en todo el territorio andaluz y afectará a los establecimientos, espectáculos y actividades que para cada programa determine la Dirección General de Interior, Emergencia y Protección Civil de la Consejería de Justicia e Interior, en coordinación con las delegaciones del Gobierno de la Junta. Este año y durante 2013 se realizarán en Málaga y su provincia tanto programas de inspección de establecimientos públicos y actividades recreativas como un programa de vigilancia policial en establecimientos públicos.

El programa de inspección se desarrollará en Málaga y su provincia en establecimientos públicos con la categoría de establecimientos de esparcimiento; es decir, salas de fiesta, discotecas, y discotecas de Juventud, de aforo superior a 700, que son competencia directa de la Junta. El objeto de estas inspecciones es comprobar la adecuación de las mismas a las exigencias de la Ley 13/1999, de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas de Andalucía mediante la inspección de sus instalaciones y/o requerimiento a sus titulares de la documentación preceptiva que corresponda. Se comprobará la documentación general del establecimiento, la documentación técnica de las instalaciones -sobre todo en lo relativo a seguridad y emergencia-. Por ejemplo, se revisarán a fondo los planes de emergencia, las instalaciones eléctricas, las condiciones térmicas, las barreras arquitectónicas o los procedimientos de evacuación.

«La periodicidad de las inspecciones fomenta actitudes responsables que repercuten en el correcto funcionamiento de las instalaciones de los establecimientos», indicó Ruiz Espejo. Así, desde el año 2009, por ejemplo, los establecimientos inspeccionados, como el teatro Las Lagunas, de Mijas o el Auditorio Municipal de la capital, que cuenta con un aforo cercano a las 12.000 personas y cuyos informes eran en principio desfavorables, sirvieron para acometer las necesarias reformas para subsanar las deficiencias. «Los establecimientos que no se adecuan a las exigencias y persisten en las deficiencias graves de seguridad son clausurados hasta su completa remodelación, como es el caso de la plaza de toros de Benalmádena.