En la puerta de los juzgados de Marbella, donde se esperaba que declararan esta mañana los acusados, entre ellos, Miguel Montes Neiro, la expectación mediática era considerable. Una de las hermanas del detenido, Encarnación Montes Neiro, estaba allí, desde primera hora de la mañana, con intención de hablar con el magistrado del juzgado de instrucción número 1 de la ciudad costasoleña.

La familiar, se mostró muy contrariada con la detención de su hermano, del que en todo momento dijo que era inocente. "Pongo la mano en el fuego por él. No tiene sentido que con tanto como ha pasado en su vida, con los 62 años que tiene, se haya metido en un lío como éste. Encima debe dos meses de alquiler de su casa y toda la familia, que estamos muy unidos, estamos pasando muchas dificultades. Si hubiera sido él no tendríamos esos problemas económicos", dijo ciertamente desconcertada.

Sin embargo, la propia Encarnación reconoció que "es posible" que algunos amigos de su hermano, del ámbito delictivo anterior en el que se movió en su pasado, sigan manteniendo contacto con él. "Pero eso no demuestra nada, y mucho menos, que Miguel robara en estas joyerías", zanjó.

Según relató Encarnación Montes Neira, los agentes de la Policía Nacional entraron en el piso de su hermano, ubicado en el núcleo urbano de Las Lagunas, en Mijas, en la mañana del pasado miércoles. "Estaba en el baño y se lo llevaron delante de su hija mayor. Tanto ella, como su otra hermana están destrozadas", afirmó.

Miguel Montes Neiro vivía en Mijas en un piso de alquiler desde el pasado mes de septiembre. Su vida, en palabras de su hermana Encarnación, "era muy sencilla y normal. Se levantaba temprano para hacerle el desayuno de sus hijas y luego llevaba la chica al instituto. El resto del día lo pasaba en casa pintando, concediendo entrevistas o trabajando en el libro que se publicó hace poco sobre su persona. Además la gente del barrio ya lo conocían y era muy querido. Es imposible que haya sido él", insistió.

Encarnación pasó toda la mañana atendiendo a los medios de comunicación y pendiente de su teléfono móvil. Y es que su otra hermana, Mari Carmen, estaba pendiente la salida del detenido de la Comisaría Provincial de Málaga, donde pasó buena parte del día prestando declaración a los agentes del orden.

Por otra parte, Miguel Gómez Molina, propietario de la joyería Gómez Molina, una de las que sufrieron el atraco del que se acusa a Montes Neiro se mostró "muy satisfecho" con la actuación policial. Asimismo, reconoció que las informaciones que manejan hablan de que ha podido recuperar gran parte de lo sustraído en su negocio, ubicado en el centro comercial Costa Marbella, el pasado 18 de noviembre.

"De mi joyería se llevaron, aproximadamente, 1,7 millones de euros en relojes, joyas y bisutería. No forzaron ninguna de las vitrinas y se lo llevaron usando las llaves. Aunque no es oficial, me dicen que han recuperado casi todo. Es como si me hubiera tocado la lotería", dijo.