Es la eterna disputa entre padres e hijos. La repetida promesa entre parejas. La manida frase de «el mes que viene, de verdad». El firme propósito de Año Nuevo que después pocos cumplen conforme pasan laos días. Todo fumador ha pasado por estos estados. Discusiones, juramentos y deseos que muchos han cumplido, pero que para otros se han quedado en el camino.

Pese a que los precios de las tabaqueras no dejan de aumentar, las prohibiciones son cada vez más severas y las autoridades sanitarias no cejan en su empeño, muchos se resisten a dejar a su amigo el cigarro. Hasta que llega un aviso. Cuando en una consulta un médico menciona la palabra «tumor» todo cambia. Se tiran cajas, mecheros, cerillas y ceniceros. Se hace una limpieza de mente que empieza por la voluntad. Pero para muchos ya es tarde.

Ayer tuvo lugar la celebración del Día Mundial sin Tabaco. Un día importante para el calendario de las instituciones, que tratan de concienciar de lo perjudicial que es fumar para la salud. Según datos de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), la previsión es que en 2013 mueran en España 17.757 personas de cáncer de pulmón. Cabe recordar que un 90% de los casos de esta clase de cáncer tienen qué ver con el tabaco, primera causa directa. Esta organización prevé que el cáncer afecte este año a 37,2 hombres y 7,5 mujeres por cada 100.000 habitantes. Y es que según un estudio de Globocan para la SEOM, de los 23.211 casos en España en 2008 de cáncer de pulmón, 20.327 murieron.

El director de la unidad de Oncología del Hospital Clínico de Málaga y jefe de servicio de Oncología radioterápica, José Antonio Medina, afirma que fumar provoca, entre otros problemas, bronquitis crónica, cáncer de pulmón, de cabeza y cuello y también de vejiga. «Son enfermedades que te pueden invalidar de por vida. Eso si no te mata», asegura.

Y es que, bajo su experiencia, reconoce que los casos detectados han aumentado en los últimos años, sobre todo a causa de la incorporación del tabaquismo como hábito en la mujer. «Hace diez años todos eran hombres, ahora entre un 15 y un 20% son mujeres».

Aún así, las normativas y prohibiciones de fumar en lugares públicos y cerrados han descendido en los últimos años las cifras de fumadores. También hay que sumar a estos grandes avances sociales los médicos, gracias a la investigación oncológica y a la incorporación de equipos tecnológicos. El doctor Medina reconoce que hace diez o quince años las personas diagnosticadas de cáncer de pulmón sobrevivían un año tras el diagnóstico. Hoy, pueden alcanzar cifras de hasta tres o cuatro años. «Hemos avanzado un poco, pero no se puede generalizar porque depende de cada caso», apunta. De hecho, el Hospital Clínico ha incorporado la radioterapia estereotáctica extracraneal, un tratamiento que evita la cirugía a tumores menores de 4 centímetros y, por tanto, la morbilidad que conlleva pasar por quirófano. El doctor Medina afirma que ya son treinta los pacientes que han pasado por esta radioterapia, que podría sustituir o compatibilizar a la cirugía, lo que conllevaría un menor gasto y menos morbilidad.

Menos ingresos hospitalarios

El Ministerio de Sanidad informó ayer de que se ha registrado un importante descenso en las tasas de ingreso hospitalario por infarto agudo de miocardio, cardiopatía isquémica y asma. «Aunque aún queda camino por avanzar, España está situada a un buen nivel respecto a otros países del mundo y de la propia Unión Europea».

Por su parte, la oncóloga de Carlos Haya Vanessa Gutiérrez apunta a que la mayoría de casos de cáncer de pulmón suelen ser de personas que al menos han fumado entre cinco y diez años. Aún así, señala que hasta que no pasa una década de haber abandonado el hábito su capacidad pulmonar y salud no se equipara con la de alguien que nunca lo ha hecho.

Sin embargo, reconoce que a muchos no les sorprende el diagnóstico. «Suelen tener patologías asociadas, saben que se la han estado jugando», añade. Pero el cáncer de pulmón no solo afecta a los fumadores, también a aquellos que han convivido con uno. «Es más inesperado y no lo piensan. Además de los pasivos también existen los que tienen parte de predisposición genética o ambiental, aunque queda mucho por saber».

Ayer se sucedieron numerosos actos en toda la provincia para concienciar a la población de los riesgos de fumar. Algunos tuvieron lugar en centros educativos y otros en hospitales, con el objetivo de evitar que la población más joven se inicie en este insano hábito.

@MarinaFernandz