La Policía ha detenido a seis personas de una organización, liderada por una mujer, que se dedicaba a captar a mujeres nigerianas en situaciones desesperadas (viudas o con muchas cargas familiares), a las que obligaba a prostituirse en Barcelona y Málaga y que controlaba mediante amenazas y ritos vudú. A las mujeres se las captaba en Nigeria y se las trasladaba en un viaje por tierra de cuatro o cinco meses hasta Marruecos, para luego embarcarlas en pateras hasta España con la promesa de que ganarían grandes cantidades de dinero ejerciendo la prostitución, a lo que se dedicaban luego bajo amenazas.