Estocada de muerte a uno de los grupos mafiosos napolitanos más activos y con más presencia en España. Dieciséis detenidos en nuestro país y alrededor de setenta en Italia es el balance provisional de una operación realizada ayer simultáneamente en ambos países por la Guardia Civil y el Arma de Carabineri y que, una vez más, ha salpicado a la Costa del Sol como lugar de refugio de los principales camorristas.

En el punto de mira de los investigadores estaba y está el clan Polverino, una gran familia de Nápoles presuntamente dedicada al tráfico de estupefacientes y al blanqueo de capitales que, según la justicia transalpina, podría controlar un imperio económico de 1.000 millones de euros a través de una maquinaria que seguía funcionando a la perfección a pesar de que el año pasado fueron detenidos en Jerez de la Frontera Giuseppe Polverino, el número uno del clan, y Raffaelle Vallefuoco, su lugarteniente. Mientras que el primero, conocido como El barón, llegó a estar en la lista de los 30 más buscados de Italia y se le considera responsable de varios asesinatos en Nápoles, su compradre aparecía en la lista de los 100 como líder de la principal célula encargada de introducir la droga en su país.

El turno de los grilletes le ha llegado ahora a Massimiliano D´Aria y Domenico Panella, dos de los principales responsables del negocio desde que Giuseppe Polverino fuera encarcelado y que fueron sorprendidos ayer en Marbella junto a dos personas más, una de ellas un abogado, tras una noche de juerga en la que no faltaron ni alcohol ni prostitutas, que aún se encontraban en el piso en el que irrumpieron los agentes a primera hora de la mañana. Hasta una treintena de agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil y de los Carabinieri italianos participaron en al menos cuatro registros realizados entre Marbella, San Pedro de Alcántara y Alhaurín el Grande.

Sin embargo, las actuaciones policiales se extendieron de forma simultánea en otros puntos del país como Ceuta, Cádiz, Alicante, Castellón y Tarragona, provincias que, junto a Málaga, dibujan el pasillo mediterráneo que la organización utizaba para transportar por carretera la droga desde Marruecos hasta el sur de Italia. A la treintena de detenidos que suma en España la denominada operación Laurel VIII, hay que añadir un otros 70 arrestos y decenas de registros en Nápoles, donde el clan Polverino tiene sus orígenes vinculados al clan Nuvoletta, una importante organización criminal de la camorra italiana que alcanzó su auge en los años noventa hasta que sus principales dirigentes entraron en prisión. Según la Fiscalía Anticorrupción, la decadencia de Nuvoletta fue aprovechada por El barón hasta erigirse como un clan independiente que asumió el monopolio de tráfico de hachís en la zona de Nápoles hasta convertirse en una de las organizaciones más poderosas de la camorra napolitana.

Con su ADN procedente de la localidad de Marano, Anticorrupción señala como principales actividades de esta organización la extorsión, homicidio, proxenetismo, usura, corrupción de las administraciones públicas, tráfico de drogas a nivel internacional y blanqueo de capitales. Estas dos últimas son las actividades de especial relevancia en España, donde habían creado una red de células territoriales para el tráfico de hachís a través de empresas de transporte de mercancías con sede en España.

«El beneficio económico generado por la organización es trasladado a España en dinero en efectivo aprovechando los transportes utilizados para el tráfico de drogas. Parte del capital procedente de las actividades delictivas del clan es invertido en diferentes negocios, entre ellos las inversiones inmobiliarias en España, donde se ha creado una estructura específicamente dedicada a dicho blanqueo», explicaron desde la Fiscalía.

La financiación de las operaciones de tráfico de drogas que realiza el clan se rige por un sistema de aportaciones o participaciones económicas, cuya cuantía e importancia están en relación con el rol que cada individuo tiene dentro de la organización. Por ello, el capo siempre tiene derecho a participar en todas las operaciones que se lleven a cabo, independientemente del grupo que las realice, siendo el mayor inversor para estas operaciones y, por tanto, el que más beneficios obtendría. Tras la operación de ayer, la Guardia Civil da por desarticulada la organización de este clan en España.

@jotrres