La amenaza de acudir a los tribunales vuelve a amenazar el futuro del metro de Málaga. El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha insistido en que éste será el recurso municipal si la Consejería de Fomento insiste en cobrar los 32,3 millones de euros que le reclama como parte de la participación municipal en la construcción.
De la Torre insiste en que la posición del Ayuntamiento «es muy sólida jurídica y políticamente» y recuerda que existe un acuerdo con el anterior equipo de la Consejería de Fomento para aplicar el mismo criterio que en Sevilla, compensando este pago con obras de movilidad en la ciudad.
«Vamos a defender los intereses de la ciudad», insistió De la Torre, quien subrayó que esto les llevará a acudir a los tribunales si la Junta no renuncia a su pretensión. No obstante, reconoció que esta medida será «sin perjuicio» de «la colaboración leal con la Junta de Andalucía» y «colaborar en todo lo que esté en nuestras manos». En esta línea, Francisco de la Torre recordó que, tras la reunión mantenida el pasado 24 de mayo con el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, tienen el propósito de «buscar una solución que permita llevar el metro soterrado hasta la plaza de la Marina, aunque lo ideal es llegar hasta La Malagueta».
Definir el modelo del último tramo del metro (Guadalmedina-Malagueta), está ahora en un segundo plano. Queda menos de una semana para que la Consejería se pronuncie sobre la petición municipal para suspender el cobro por vía ejecutiva de los 32,3 millones de euros solicitados. Ante la posibilidad de que no haya una marcha atrás, De la Torre afirmó que tiene «muy claro» continuar con su reclamación. «Colaboraremos en todo lo posible, pero no económicamente porque no nos corresponde», aclaró.
Ante la exigencia del pago de 32,3 millones de la Junta al Ayuntamiento, éste argumentó que había ejecutado más de 17 millones en obras de movilidad.
