El consejero de Cultura y Deportes de la Junta de Andalucía, Luciano Alonso, lleva de baja desde finales de abril a causa de una rotura del tendón del cuadriceps de su pierna derecha. Pero la lesión, que lo ha mantenido alejado de cualquier aparición pública, no le ha impedido planificar, analizar, estudiar y debatir con su equipo los numerosos proyectos que su consejería tiene sobre la mesa. Detrás de todo este trabajo hay un objetivo principal: que los ciudadanos «no pierdan el derecho de disfrutar de la cultura». En unos días, Alonso se reunirá con el secretario de Estado de Cultura, José María Lassalle, para concretar en qué términos se llevará la Biblioteca Provincial al Convento de la Trinidad, una de las grandes apuestas de la Junta para Málaga en materia cultural.

¿Cuáles son las principales líneas de actuación del Pacto por la Cultura?

Al llegar a esta consejería marcamos una serie de objetivos claros. La primera prioridad son las personas. La cultura en época de crisis y con una reducción presupuestaria del 30% de casi todas las instituciones, se coloca en un lugar excluyente para los ciudadanos. Tenemos una cultura fuertemente subvencionada por los poderes públicos y con una descomunal subida del IVA al 21%. Esto hace que mucha gente no pueda acceder a la cultura. Nuestro primer objetivo fue buscar las fórmulas que permitan al ciudadano el disfrute de la cultura. Porque la cultura le hace al ciudadano mucho más libre, más autocrítico, más igual y lo hace más emprendedor. Y a la vez pensamos en que la doble condición de la cultura es que genera riqueza y empleo. Nuestras prioridades están basadas en que el ciudadano no vea restringido el uso y disfrute de la cultura y que las industrias culturales y los creadores ganen dinero y creen empleo. Por eso impulsamos la Ley de Mecenazgo, que busca la complicidad de los ciudadanos andaluces con la cultura.

¿Qué diferencias hay con otras?

Hasta ahora, la única ley de mecenazgo que existe en España tienen como únicos destinatarios las grandes empresas y las grandes fortunas, que para obtener alguna bondad fiscal requieren hacer una gran inversión. Lo que significa que las pequeñas y medianas empresas a penas juegan en este campo. Lo que buscamos es que si el 98% de las industrias culturales andaluzas son Pymes, éstas se vean beneficiadas. Lo que hacemos es dar protagonismo al ciudadano de a pie para que la desgravación particular contribuya al mantenimiento de las industrias creativas y de la cultura. El Pacto por la Cultura es una respuesta que busca un concepto sostenible de la cultura a través de la implicación de los ciudadanos. El tercer objetivo fue reclamar el patrimonio para el uso y disfrute de los ciudadanos, además de conservarlo, preservarlo y difundirlo.

¿Entonces, la entrada del cine nos costará menos?

Sí. Cuando se apruebe la ley de mecenazgo se podrá deducir el 12% del precio de las entradas del impuesto de las personas físicas.

La Biblioteca Provincial en la Trinidad es una de sus grandes apuestas para Málaga. ¿En qué situación se encuentra?

Málaga es la única provincia de España que no tiene Biblioteca Provincial. Estamos instalados en una sede provisional arrendada por la que pasan 230.000 usuarios cada año. Los andaluces, a través de la Junta, llevan gastado más de mil millones de las antiguas pesetas en ese arrendamiento, cuando hablamos de una infraestructura de titularidad del Estado. Además, en los actuales presupuestos generales sólo se recogen 50.000 euros al Convento de San Agustín, lo que supone un 1% de los catorce millones necesarios. Así que decidimos mover ficha para acabar con ese arrendamiento. Lo que ofrecemos al Ministerio de Cultura -en unos días me reuniré con el secretario de Estado de Cultura, José María Lassalle- es la posibilidad de abordar conjuntamente la Biblioteca Provincial en el Convento de la Trinidad.

¿Cómo será?

Queremos que no sea sólo un contenedor de libros sino la biblioteca de referencia del siglo XXI, con los servicios sociales, culturales y tecnológicos más avanzados. Con préstamo de libros electrónicos; el desarrollo de aplicaciones para el uso de todos los servicios bibliotecarios y su vinculación con las redes sociales; la interactuación con los usuarios y la creación de foros de lectura virtuales. Una biblioteca donde se puedan realizar otras actividades como exposiciones, proyecciones, teatro y todo tipo de manifestaciones culturales. Existirá una especial atención a los contenidos malagueños y andaluces, y además de las secciones existentes, incorporaremos las salas de lectura infantil y juvenil, así como una especial atención al cómic. Un espacio cultural activo e innovador que junto al Archivo Histórico Provincial, se conviertan en el mayor centro de acceso a la información de Málaga. Creo que le debemos al barrio de la Trinidad una apuesta cultural como ésta.

Que además estaría unida al centro de arte rupestre de la Unesco.

Claro, así el Convento de la Trinidad tendría una doble función. Deseamos es acelerar los procesos para que sea una realidad.

¿Entiende que los malagueños desconfíen de las promesas de la Junta sobre el Convento de la Trinidad?

Sí. Pero estamos hablando de una oferta realista y necesaria. Y creo que la Biblioteca Biblioteca Provincial marcará un antes y un después para el barrio de la Trinidad. Tras reunirme con Lassalle, la licitación del proyecto podría estar en septiembre. Además, la rehabilitación del convento, una obra de 3,5 millones que ahora termina, es un hecho.

El Museo Picasso cumple diez años. En palabras de su actual director, Picasso sigue siendo un gran desconocido para los malagueños. ¿Queda mucho por hacer en este sentido?

Con carácter general, los museos reciben un 70% de visitantes de de fuera. Lógicamente, habría que hacer un esfuerzo en la aproximación de Picasso a Málaga y a los andaluces. Es un objetivo que nos hemos marcado y para ello hemos propuesto elementos correctores, como la mayor implicación con los escolares. El Picasso es uno de los museos con más actividades con escolares, con lo que se crea cantera. El aumento de acciones del departamento pedagógico del museo con los centros educativos de toda la provincia y con la Universidad de Málaga potencia la creación de nuevos públicos. Y las exposiciones también caminan en esa dirección. Por ejemplo, Picasso de Málaga ha recibido 70.000 visitas, convirtiéndose en una de las exposiciones temporales más visitadas de la historia de la pinacoteca. Y en este momento llevamos contabilizadas 1.000 visitas más que el año pasado en estas fechas.

El Picasso fue un gran revulsivo en la vida cultural de la ciudad, como esperemos que lo sea el Museo de Málaga.

En relación al Museo de la Aduana de Málaga le expresó mi deseo de que cuanto antes sea un museo abierto del que puedan disfrutar los ciudadanos. Valoro el gran esfuerzo realizado por los distintos gobiernos para que este museo sea una realidad. Asimismo, le recuerdo que el compromiso del Ministerio de Cultura con Málaga y con Andalucía era ofrecer un museo, por tanto, con su museografía finalizada y no un edificio para hacerse cargo de su mantenimiento. Hoy me entristece que los fondos del Museo de Málaga todavía sólo puedan ser visitados a través de su página web o en fechas especiales, como el Día Internacional de los Museos, con visitas al centro de depósitos en el Parque Tecnológico. Y me preocupa que con los plazos que maneja el gobierno la apertura se prolonguen a 2015. En estos momentos ya se ha licitado el proyecto museológico del mismo, esperemos que el compromiso del Gobierno se mantenga y cuanto antes podamos abrir las puertas del Museo de Málaga.

¿Cuándo cree que se materializará la promesa del uso escénico del Teatro Romano?

La marca Teatros romanos de Andalucía empezará su andadura en los próximos días. La consejería está comprometida con este valiosísimo patrimonio histórico como generador de economía y empleo. Queremos poner al servicio de la ciudadanía una serie de actividades relacionadas con el mundo grecolatino que incluya representaciones, actividades escolares y visitas guiadas. En el caso de Málaga, el procedimiento es distinto debido a las características del espacio, ya que se trata de un yacimiento en el centro de la ciudad y abierto a la misma, por ello estamos diseñando una fórmula que nos permita su uso escénico garantizando la protección patrimonial y garantizar la seguridad de los asistentes. Habrá un concurso de ideas para generar proyectos viables. Pero puedo adelantar que en octubre comenzarán las representaciones en el Teatro Romano de Málaga.

La Orquesta Filarmónica de Málaga no cuenta con el respaldo del público y ahora se abre un periodo de inestabilidad sin director artístico. ¿Le preocupa esta situación?

La Consejería de Cultura ha venido propiciando un cambio de modelo de gestión en las cuatro orquestas andaluzas en las que participa. Este cambio de modelo debe conseguir la sostenibilidad económica, el disfrute de un mayor número de ciudadanos de sus conciertos, la máxima transparencia en su funcionamiento y la participación de la sociedad civil en su desarrollo. Pues bien, la Filarmónica de Málaga es quizás donde más se necesita ese cambio de modelo de gestión: sus presupuestos se nutren en un 98% de financiación pública, cuando la media de las demás orquestas está en el 78 %, que ya es elevado. La causa fundamental de este desequilibrio es que los ingresos de las taquillas y abonos de la OFM se quedan en el Teatro Cervantes, como compensación por su utilización. Es absolutamente desproporcionado el coste que esto supone, porque lo que hemos instado a que se alcance un acuerdo acorde con otros lugares, en los que se paga el alquiler correspondiente pero los ingresos los gestiona la orquesta. Desde el punto de vista artístico, y una vez acabado el contrato del maestro Edmon Colomer, hay que abrir un nuevo periodo y un impulso en la programación y en las actividades complementarias. Por ello, hemos propuesto y acordado abrir un proceso de concurrencia para la selección de la nueva dirección artística. También queremos potenciar a la Orquesta Joven de Andalucía como cantera y vamos a firmar convenios con las cuatro orquestas andaluzas para los alumnos desarrollen prácticas en ellas.

«Iniciarte nos permitirá disfrutar del arte más nuevo y actual»

¿Qué novedades encontraremos en la próxima temporada del Teatro Cánovas?

El Teatro Cánovas es una excelente infraestructura para fomentar, además de la clásica programación, propuestas escénicas destinadas a público infantil, juvenil y de familia. Queremos que se consolide como una auténtica herramienta para el desarrollo de las industrias culturales en el terreno escénico a través de un programa de residencias para compañías malagueñas. Asimismo, pondremos en la próxima temporada en marcha hasta cinco talleres y escuelas sobre cine, danza, circo, flamenco y teatro bilingüe. Por supuesto mantendremos la seña de identidad que representa para el Cánovas el ciclo de Humor. Destacar también la participación de la Junta en la Bienal de Flamenco de Málaga, un ejemplo de colaboración institucional para la promoción de nuestro arte, Patrimonio de la Humanidad. Colaboramos con 29 actividades que comprenden tanto espectáculos y recitales como exposiciones de flamenco y proyecciones de documentales en diferentes espacios.

¿Cree que el Palmeral se ha convertido en el gran regalo para los jóvenes creadores?

Hemos puesto en marcha una solución que nos permitirá disfrutar y expresar el arte más nuevo y actual. La Sala del Palmeral de las Sorpresas es una realidad. Los jóvenes creadores andaluces y malagueños no pueden esperar, no queremos que esperen para tener una oportunidad de exhibir y compartir sus creaciones. Con ese objetivo hemos puesto en marcha del proyecto Iniciarte para nuevos creadores. Tomamos partido por la transparencia, la concurrencia y la igualdad de oportunidades. Para ello ya se ha nombrado una comisión de expertos que atiende al Código de Buenas Prácticas y es paritaria, como manda el Pacto por la Cultura. Esta comisión elegirá de entre todos los proyectos aquellos que formaran parte de la programación de este espacio. Los creadores elegidos contarán con un catálogo de su propuesta para garantizarles y facilitarles así su continuidad artística en otros ámbitos y espacios. Recuperar el programa Iniciarte primero fue una reivindicación del sector, luego una propuesta, una convicción de la necesidad del apoyo a nuestros jóvenes creadores, y ahora una realidad.