Los grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Málaga criticaron ayer la «aberración» del equipo de gobierno de permitir la demolición de dos edificios históricos del Centro de la capital para permitir la construcción de un edificio destinado a apartamentos turísticos.

Los dos edificios ocupan los números 22 y 24 de la calle Tomás Heredia. Uno de ellos, el correspondiente al número 22, ya fue demolido con la autorización de la Gerencia de Urbanismo hace varios años; el segundo obtuvo ayer el permiso en el consejo de la Gerencia de Urbanismo para ser derribado gracias a los votos favorables de los miembros del equipo de gobierno y con el rechazo de PSOE e IU.

Los portavoces de ambos grupos lamentaron el «escaso respeto» que el gobierno municipal tiene por la arquitectura histórica de la ciudad. Eduardo Zorrilla, de IU, y Sergio Brenes, por el PSOE, señalaron que tanto el edifico ya demolido como el que se ha autorizado su demolición son dos inmuebles históricos «representativos de la Málaga del siglo XIX». En el caso del que va a ser derribado señalaron que se encuentra en «buen estado» y tiene protección ambiental, que no impide su demolición, pero que debería evitarse si se quiere trabajar por la conservación del patrimonio de la ciudad.

En el solar que quedará tras la demolición de ambos inmuebles, un suelo de 230 metros cuadrados, la Gerencia de Urbanismo ha dado licencia para la construcción de un edificio destinado a apartamentos turísticos.

El edificio, de cuatro plantas más ático, albergará 22 apartamento turísticos destinados al alquiler, distribuidos en uno o dos dormitorios, salón, cocina y baño y dirigidos fundamentalmente a personas en viaje de negocios, trabajadores o empresarios que pasen una breve temporada en Málaga.