El Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) tendrá el año próximo una fuerte subida superior al 10% para más de la mitad de las viviendas, unas 120.000, es decir aquellas cuyo valor catastral están por debajo de los 72.000 euros y que sus propietarios son familias con bajo poder adquisitivo, mientras que para la otra mitad, con más valor, la subida será más moderada e incluso con bajadas en algunos tramos. Tanto el IBI como el resto de impuestos y tasas y precios públicos fueron aprobados ayer por el pleno del Ayuntamiento de Málaga con el respaldo del equipo de gobierno y el rechazo de los grupos de la oposición y el concejal independiente.

Junto al IBI el pleno aprobó la congelación de la mayoría de los impuestos y tasas para 2014 con la excepción del IAE que bajará un 5% a los negocios que contraten personal y aumenten su plantilla y el propio IBI que bajará también para los comercios y negocios de hostelería. El resto, caso del agua, el autobús, o la grúa mantendrán los mismos precios que este año.

La oposición criticó que la subida del IBI afectará a las familias más necesitadas, mientras que no gravará a los más propietarios de inmuebles con alto valor. de ahí que la portavoz del PSOE, María Gámez comparase al alcalde, Francisco de la Torre con el 'sheriff de Nottingham', el enemigo de Robin Hood que recaudaba el dinero de los siervos.

Tanto Gámez como el portavoz de IU, Eduardo Zorrilla recordaron que la subida del IBI no depende sólo de la baja del tipo de gravamen, sino del descenso de los valores catastrales de las viviendas que en Málaga "son muy altos

La concejala de Economía, María del Mar Martín Rojo, por su parte defendió los nuevos tributos para 2014 que se basan en una "política fiscal moderada" y que tienen el triple objetivo de pensar en el ciudadano, garantizar los servicios públicos y ayudar a crecer al tejido productivo