­El Ayuntamiento de Málaga aprobó ayer provisionalmente las ordenanzas fiscales que fijarán el coste de los impuestos, tasas y tributos en general para el año próximo. Como regla general, la mayoría de los tributos permanecerán congelados en 2014 con excepción del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y que tendrá una repercusión especialmente en las familias con menos recursos económicos. Las ordenanzas fueron aprobadas con los votos del PP y el rechazo de los grupos de la oposición y el único concejal independiente.

La subida del IBI aprobada ayer supondrá el año próximo un incremento en los recibos superior al 10% para más de la mitad de las viviendas, unas 120.000, es decir aquellas cuyo valor catastral está por debajo de los 72.000 euros y cuyos sus propietarios son familias con bajos recursos económicos. Se trata de los inmuebles a los que el año próximo les afectará de lleno la revisión catastral. Para la otra mitad de inmuebles, con valores catastrales más altos, la subida será más moderada e incluso con bajadas en algunos tramos.

La mayoría de tributos no sufrirán cambios en 2014 con la excepción del IAE, que bajará un 5% a los negocios que contraten personal y aumenten su plantilla, y el propio IBI, que descenderá también para los comercios y negocios de hostelería. El resto, caso del agua, el autobús, el Sare o la grúa, mantendrán los mismos precios que este año.

La oposición criticó que la subida del IBI afectará a las familias más necesitadas, mientras que no gravará a los demás propietarios de inmuebles con alto valor. Tanto María Gámez, por el PSOE, como el portavoz de IU, Eduardo Zorrilla, recordaron que la subida del IBI no depende sólo de la bajada del tipo de gravamen, sino de los valores catastrales de las viviendas, que en Málaga «son muy altos».

La concejala de Economía, María del Mar Martín Rojo, defendió los nuevos tributos para 2014, que se basan en una «política fiscal moderada» y que tienen el triple objetivo de pensar en el ciudadano, garantizar los servicios públicos y ayudar a crecer al tejido productivo. Rojo argumentó que el diseño de los tributos para 2014 lleva también el marchamo de la responsabilidad económica, porque con ellos «se garantiza la estabilidad presupuestaria y la sostenibilidad financiera». Todo ello, dijo, gracias a «una política de austeridad y de control del gasto realista, transparente, social, redistributiva y que facilita el empleo».

La oposición centró sus críticas especialmente en la subida del IBI. María Gámez aseguró que los recibos del IBI «son de los más altos de nuestro entorno». La razón, según la portavoz socialista, está en que «por mucho que bajen el tipo impositivo, que, no obstante, podría bajarse más, es necesario revisar los valores catastrales, que en Málaga son muy superiores a ciudades como Valencia»

El portavoz de IU insistió en el mismo argumento al indicar que «los valores catastrales en Málaga son muy altos y aunque el tipo impositivo sea bajo, al aplicarse sobre un valor elevado hace que al final el recibo a pagar sea muy alto. De ahí que ambos concejales de la oposición insistieran en la necesidad de una revisión a la baja de los valores catastrales.

Sobre las críticas de la oposición en relación con la cuota del IBI, Rojo las tachó de «demagógicas», incidiendo en que «hasta que no se cumplan cinco años no podemos pedir la actualización», por lo que se solicitará al Gobierno en 2014. «Nosotros cumplimos la ley y hacer creer a los malagueños que podemos ahora plantear una actualización o una revisión catastral y que no se hace porque no queremos es faltar a la verdad», señaló.

De igual modo, la edil del PP recordó que desde 2001 el alcalde de Málaga implantó un reglamento de ayudas al IBI, que acumula más de cinco millones de euros y de las que se benefician sobre todo pensionistas y desempleados.

Las ordenanzas fiscales contemplan para el próximo año un incremento medio del IBI del 2,2 por ciento en el 60 por ciento de las viviendas -6,7 euros anuales-. Sin embargo, bajará un promedio del 3,5 por ciento en el caso de comercios, oficinas, almacenes y hostelería.

Respecto a otros impuestos, el ICIO se mantiene y se crea una nueva bonificación del 20 por ciento de la cuota con el objetivo de fomentar el empleo, mientras que el de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) se congela por segundo año consecutivo. El IAE, por su parte, se bajará a los negocios que contraten personal y aumenten su plantilla.

Para el próximo año se mantendrán igual las tarifas de la Empresa Malagueña de Transportes (EMT), los aparcamientos municipales, la zona azul o la grúa.