El 69% de los pacientes hospitalizados sufre al menos un error relacionado con la administración de medicamentos, de los que el 1% son considerados errores graves. José Luis Poveda, presidente de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), que hasta el viernes celebra en Málaga su 58º congreso nacional, defendió ayer la utilización de las nuevas herramientas tecnológicas para ayudar a mejorar la seguridad en la dispensación de los medicamentos para corregir ese pequeño porcentaje de errores graves, fruto, indicó, «de la rapidez con la que se toman las decisiones y del entorno de estrés» en áreas como las urgencias hospitalarias.

Según Poveda, un elemento clave que empieza a ser una realidad es el control de la administración de medicamentos a través de unos dispositivos, similares a los códigos de barra, que confirman que el paciente recibe el medicamento y la dosis adecuada.

En los servicios de urgencias es donde se producen el mayor número de errores de medicación que pueden ser evitables. Según Beatriz Calderón, miembro del grupo de trabajo de Atención Farmacéutica en Urgencias de la SEFH, hasta un 12% de los pacientes que pasan por estos servicios sufre incidentes relacionados con la seguridad. De ellos los más comunes son los relacionados con la prescripción y administración de medicamentos (omisión de tratamientos, dosis incorrectas, error en la administración o en su preparación).

A juicio de Calderón, «se debe seguir trabajando para conseguir que la atención sanitaria en las urgencias de nuestros hospitales no sólo resulte eficaz, sino también segura y no ocasione daños a los pacientes». Para ello, el papel del farmacéutico de Urgencias resulta fundamental porque «tiene la formación y dispone del tiempo necesario para llevar a cabo la anamnesis completa desde el punto de vista farmacológico (datos clínicos relevantes y otros del historial de un paciente) y recomendar así el mejor tratamiento del paciente, tanto a su ingreso como una vez que se le da el alta».

Al margen de las Urgencias, y según un estudio reciente, la mayor tasa de errores se localizan en Cirugía (67,6%), Hematología (59,4%) y Medicina Interna (46,6%). Al respecto, durante el congreso de farmacia hospitalaria se presentará un plan estratégico para la seguridad del paciente.