El consejero de Educación, Cultura y Deporte, Luciano Alonso, ha declarado hoy que con la reforma educativa se quiere "volver atrás, a la antigua reválida" y que eso "suena a rancio".

Alonso ha manifestado en una rueda de prensa en Málaga que los profesores, alumnos y padres "han dicho no" a esta reforma, y ha añadido que desde la Junta de Andalucía han pedido la comparecencia en el Senado de la Comisión de Comunidades Autónomas.

Ha apuntado que esta ley "tiene en contra a todos los grupos parlamentarios menos al PP", y que todos los partidos se han comprometido a que "si el PP pierde la mayoría absoluta, se cambiará la ley".

Además, ha asegurado que la reforma significa un retroceso "tremendo" para las políticas educativas en Andalucía, que hizo que quedasen atrás aquellos años en los que la comunidad autónoma "era de las últimas en educación por el número de analfabetos que tenía".

El consejero de Educación ha destacado que se han llevado colegios e institutos a los últimos rincones de Andalucía y que se ha hecho un "gran esfuerzo presupuestario sin precedentes" por la educación.

Alonso ha comentado que con esta reforma se mandará a personas "muy jóvenes sin ser capaces de decidir y sin haber tenido la madurez necesaria, a una mano de obra barata".

Por último, ha dicho que "ojalá haya una posibilidad de consenso" y que al Gobierno andaluz les gustaría que "se parase la ley y se pudiera llegar a un acuerdo".