Los alumnos de la escuela de hostelería de La Cónsula empezarán definitivamente las clases la semana que viene, aunque de un modo no precisamente oficial ni conforme a lo esperado. Los estudiantes, cansados de la falta de respuestas de la Junta de Andalucía, que lleva prometiendo sistemáticamente desde finales de verano la apertura inminente del curso, tienen previsto acudir a lecciones de repaso teórico en los aparcamientos del complejo.

La iniciativa, explica Javier Mahedero, delegado del curso de servicio, ha sido adoptada después de que la administración no acertara a precisar la fecha de inicio del periodo lectivo, que sigue fijado para octubre, aunque de manera todavía laxa. Los alumnos han intentado utilizar las aulas para aprovechar este nuevo compás de espera, pero la dirección se ha negado al no contar con la autorización pertinente de la Junta de Andalucía. "Es absurdo que estando los profesores a diario en el centro no podamos empezar las clases ni siquiera como repaso teórico y tengamos que irnos a los aparcamientos, que son del Ayuntamiento y de uso libre", señala Mahedero.

Los estudiantes aseguran que los continuos retrasos de la administración, que ya se ha demorado con el comienzo del curso en casi 40 días, repercuten negativamente en su formación y economía, ya que, pese a que la matrícula de la escuela es gratuita, muchos de ellos proceden de otras provincias y llevan asumiendo gastos como el del alquiler de vivienda desde el pasado septiembre.