El Pleno del Ayuntamiento de Málaga ha aprobado este viernes por unanimidad la iniciativa socialista en la que se instaba a frenar de inmediato la tramitación relativa a la instalación de una nueva gasolinera en la zona de La Barriguilla, recogiendo así el sentir de la mayoría de los vecinos que iban a resultar afectados, y en espera de obtener un cambio en la ubicación que satisfaga las demandas vecinales.

La portavoz socialista, María Gámez, ha destacado la importancia de que se haya paralizado el proyecto que contaba con un total de 1.500 firmas en contra de los vecinos de la barriada, así como con el rechazo de los grupos políticos de la oposición.

El 14 de junio, la Junta de Gobierno Local acordó la aprobación inicial del Plan Especial para la instalación de una estación de servicio en suelo urbano calificado como comercial del Sector “La Barriguilla”.

El grupo municipal Socialista en el ejercicio de su labor de control y fiscalización del equipo de gobierno municipal, y ante la alarma que suele causar la implantación de estas infraestructuras en los núcleos urbanos, teniendo en cuenta las particularidades que rodean a esta gasolinera en concreto, por la proximidad a otra instalación de semejantes características y cercanía a viviendas, se puso en contacto con la Asociación de Vecinos de La Barriguilla y con las comunidades de vecinos más próximas a la nueva instalación, para informarles de lo aprobado por el Ayuntamiento de Málaga.

Tras varias reuniones de los vecinos, éstos deciden organizarse para rechazar esta nueva gasolinera programada y tramitada a espaldas de los vecinos por el equipo de gobierno del Partido Popular, por los problemas de ruido y de seguridad que puede provocar al coincidir dos gasolineras en una zona muy cercana a las viviendas y porque esta implantación no concuerda con la política general que se viene practicando en muchas ciudades españolas, de sacar las estaciones de servicio de los núcleos urbanos, tal y como se hizo en las que existían en Fuente Olletas y en calle Alemania.