La reestructuración laboral anunciada por la Diputación de Málaga para la Sociedad de Planificación y Desarrollo (Sopde) afectará finalmente a 18 trabajadores, en vez de los 27 previstos. Además, la dirección de la empresa pública y los trabajadores han acordado reducir un 12 por ciento de media.

El proceso de negociación se inició el pasado 20 de septiembre, cuando la empresa comunicó a los representantes de los trabajadores su intención de iniciar un procedimiento de despido colectivo por causas económicas, productivas y organizativas. Así, se constituyó una mesa de trabajo en la que se han debatido, según informaron desde la propia Diputación, «multitud de propuestas con el objetivo de valorar las posibilidades de evitar o reducir los despidos colectivos y de atenuar sus consecuencias».

En este sentido, se ha reducido el número de salidas inicialmente previstas «gracias al esfuerzo de todas las partes, que partieron de la base de que el despido colectivo debía ser el último mecanismo de reestructuración a aplicar». En el seno de las negociaciones se han trabajado criterios de designación habituales en una reestructuración socialmente responsable, basados en la voluntariedad, la proximidad a la edad de jubilación o la pertenencia a un colectivo con posibilidad de retorno a la Administración pública, buscando con ello minimizar el impacto social de la medida, explicaron desde la institución a través de un comunicado de prensa.

Estas medidas son consecuencia de un proceso de negociación en el que cada una de las partes «ha realizado un esfuerzo para ceder en sus posiciones iniciales hasta alcanzar un punto de entendimiento que permitiera una solución pactada». De este modo, se han integrado los diferentes intereses «hacia un objetivo común y procurando minimizar el impacto de la medida extintiva».