El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, quitó ayer importancia a que el metro no se ponga en servicio este año, como había prometido la Consejería de Fomento. Considera que el retraso en elegir el trazado hasta el Hospital Civil, decisión de la que depende obtener la financiación para su puesta en marcha, no es tal y que hay plazo hasta final de año para llegar a un acuerdo. En este sentido, De la Torre afirma que la elección del trazado no será unilateral por el Ayuntamiento, sino que se tomará de forma consensuada con la Junta y los vecinos. No obstante, para ello siguió reclamando los estudios que justifican ambas alternativas y que la Consejería de Fomento insiste en que ya tienen.

Mientras este debate se volverá a plantear en la reunión de la Comisión de Seguimiento del Metro prevista el jueves, a la que asistirá el alcalde, éste anuncia que hablará con el director de Operaciones de Financiación en España y Portugal del Banco Europeo de Inversiones (BEI), Carlos Guille, para tranquilizarle y transmitirle el compromiso municipal para llegar a un acuerdo que desbloquee el proyecto. Del BEI depende la puesta en marcha del metro, aunque la concesión de 46 millones de euros para su entrada en servicio lo vincula a un acuerdo entre la Junta y el Ayuntamiento sobre trazado y calendario.

El concejal de Movilidad, Raúl López, por su parte insistió en que si los únicos estudios que hay son los ya facilitados por la Junta «haría falta una valoración técnica más profunda antes de tomar una decisión y poder explicárselo a los vecinos».

Raúl López, no obstante, descartó que el retraso en la apertura sea por el Ayuntamiento y recordó que todavía quedan obras que realizar en las líneas 1 y 2.