El decano del Colegio de Economistas, Juan Carlos Robles, criticó ayer que no se dote a Málaga de más juzgados de lo Mercantil -sólo hay dos-, instrumentos vitales para abandonar la crisis económica puesto que las empresas que se declaran en concurso acaban muriendo en el intenta porque frente al año legalmente previsto para este tipo de procesos en Málaga la fase común alcanza el cuatrienio. Eso sí, Robles hizo una comparación políticamente incorrecta y se quejó de que se cree un tercer juzgado de Violencia de Género, que están relativamente descargados de trabajo, cuando lo que hacen falta son juzgados Mercantiles. «Hemos de denunciar el colapso de los juzgados de lo Mercantil. El Consejo General del Poder Judicial dijo que aquí hacían falta 10 juzgados, pero no se dota de medios porque no dan votos. Un concurso en fase común puede tardar cuatro años, y la ley dice doce meses. El 96% de las empresas en concurso acaba en liquidación», lo que supone la desaparición de puestos de trabajo y que los acreedores no cobren. A Robles le parece «bien» que abran juzgados de Violencia de Género, pero la falta de medios en la Justicia, en concreto en la jurisdicción Mercantil, «se ha cargado miles y miles de puestos de trabajo en Málaga», y recordó que en Pontevedra hay tres juzgados especializados frente a los dos de Málaga. De cualquier forma, los dos órganos malagueños están lastrados por procesos concursales de grandes empresas que una sola oficina tardaría años en resolver pese a los refuerzos.