La portavoz socialista en el Ayuntamiento de Málaga, María Gámez, se ha congratulado del fin de la huelga de limpieza en la capital, tras el acuerdo entre el Consistorio, la dirección de Limasa y los representantes de los trabajadores, pero añadió que la ciudad «estará más sucia en los próximos dos años».

La socialista reclamó al alcalde, Francisco de la Torre, un «pacto político sobre el futuro de la empresa» que, en su opinión, debe pasar por su municipalización, «la mejora del servicio y la estabilidad laboral».

Tras reclamar «celeridad» para que la ciudad recupere la normalidad, tanto en los barrios como en el Centro, advirtió de que Málaga «estará más sucia porque habrá recorte de plantilla y menos trabajadores limpiando».

A su juicio, «la actitud bronca» del regidor al presentar el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) «provocó un bloqueo de las negociaciones». Para Gámez, la huelga, que se ha prolongado cuatro días, «podía haberse evitado hace semanas, a la vista de los aspectos concretos del acuerdo alcanzado».

Según la portavoz socialista, la «única conclusión clara» es que los socios privados de Limasa «seguirán cobrando sus beneficios y el Ayuntamiento tendrá que afrontar con el dinero de los malagueños la diferencia del recorte previsto y el que al final representa el acuerdo firmado».