La oposición en bloque, con el concejal independiente Hernández Pezzi a la cabeza, advirtió ayer al equipo de gobierno de «la actuación ilegal» en el Campamento Benítez, donde se está trabajando sin que previamente se haya aprobado el plan especial de la zona que exige el PGOU, lo que además supondría «una infracción urbanística» prevista en la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA)» que puede costar caro al Ayuntamiento, a juicio de Pezzi.
Pezzi y los ediles de PSOE e IU presentes en la comisión de Urbanismo ligaron el cese del anterior jefe de Planeamiento de la Gerencia de Urbanismo, Miguel Ángel Ruiz Barrionuevo, con esta «actuación ilegal» ya que Barrionuevo habría reclamado que se aprobase el plan especial del Benítez antes de iniciar allí cualquier actuación.
Pezzi señaló que «lo que está haciendo el Ayuntamiento en el Benítez no está amparado por la ley; el Benítez ahora es un chumbo» y reclamó que se «restablezca la legalidad urbanística».
A su vez, tanto Eduardo Zorrilla, por IU, como Sergio Brenes por el PSOE, insistieron en que lo hecho hasta ahora en el Benítez «es una ilegalidad manifiesta» y pidieron un plan especial que avale legalmente lo que allí se haga.
El edil de Urbanismo, Francisco Pomares, tachó de «novela urbanística» lo dicho por la oposición y rechazó cualquier ilegalidad «pues todo lo hecho hasta ahora allí está avalado por los servicios jurídicos». Se permitió incluso pedir a Sergio Brenes que le llame «y le daré una lección de urbanismo, que le hace falta», y a Pezzi le mandó «como deberes estudiar el reglamento de planeamiento».
