En el debe más importante de la Universidad de Málaga y de sus alumnos siguen estando el poco uso que realizan los estudiantes de las tutorías presenciales. El 55,2% reconoce que no ha ido nunca. En cambio, cobran fuerza las tutorías y consultas a través del correo electrónico. Adelaida de la Calle explicó que hay veces en que los alumnos escriben a altas horas de la madrugada. «Sin embargo, por alguna razón, no hacen uso de las tutorías presenciales más que el día antes del examen para hacer un examen al profesor», bromeó ayer la rectora. Llama mucho la atención este dato, ya que el Espacio Europeo de Enseñanza Superior establece las tutorías como una prioridad.