La Agrupación de Cofradías ya ha dado a conocer de forma oficial al Cabildo de la Catedral su solicitud de que se estudie la viabilidad de poder abrir la puerta del Postigo de los Abades para crear un segundo acceso que permita, en el futuro, la salida o entrada de los cortejos procesionales que en Semana Santa hacen estación de penitencia en su interior. Se trata de una opción que posibilitaría una solución a los numerosos problemas de horarios que no terminan de corregirse en la actualidad.

La Agrupación hizo entrega el pasado jueves de la carta en la que pide por escrito a la Catedral «que contemple la posibilidad de abrir una segunda puerta, de salida o de entrada, para poder empezar a trabajar en las soluciones técnicas necesarias, con el previo visto bueno del Cabildo», explicó Miguel Ángel Vargas, presidente de la comisión de relaciones con el Cabildo Catedral de la entidad de San Julián, quien no obstante reconoce la complejidad de este asunto.

La intención de la Agrupación es convocar una próxima reunión con el deán, Alfonso Fernández-Casamayor, «para explicarle con más detalle las ideas relacionadas con este proyecto» y que estaría vinculado a la rehabilitación y peatonalización del entorno de la Catedral, que después de Semana Santa acometerán de forma conjunta el Gobierno andaluz y el Ayuntamiento de Málaga.

«Peatonalizar podría permitir pensar en ese segundo acceso, aunque obviamente también serán necesarias algunas modificaciones en la puerta del Postigo de los Abades y la instalación de una gran rampa para salvar la altura actual», añadió Miguel Ángel Vargas.

«Estamos a la espera de una respuesta y confiamos en que el deán, aunque muestra serias dudas en principio, al menos lea la carta y nos pregunte», insistió.

Todas las cofradías que en la actualidad acceden al Primer Templo para hacer estación de penitencia apoyan esta iniciativa. Incluso se han interesado por este proyecto algunas que, si bien no entran en la Catedral, no descartarían hacerlo en el caso de contar con la segunda puerta. Son los casos de Gitanos y Fusionadas, según señaló Miguel Ángel Vargas. En el caso de la cofradía del Miércoles Santo, dejó de entrar al Primer Templo en 1992 por motivos de organización y la complejidad que suponía comprimir las cuatro secciones bajo las naves catedralicias, precisamente por contar tan sólo con una puerta de acceso: la del Patio de los Naranjos.

El portal cofrade El Cabildo informó recientemente de la existencia de un proyecto firmado por los arquitectos Rafael Gómez Martín y Francisco Javier Cuerda Fiestas hace una década, con la solución técnica para la salida de los tronos por la puerta del Postigo: una rampa desmontable cuya instalación ascendía entonces a unos 6.000 euros; así como las necesarias modificaciones en la reja del atrio.