­La mayoría absoluta del PP impidió que prosperara la petición del grupo de IU que exigía la dimisión del concejal de Medio Ambiente, Raúl Jiménez, por su gestión de la crisis del picudo rojo, que en los últimos meses ha provocado la pérdida de 26 palmeras centenarias del Parque de Málaga.

Tampoco fue aceptada la petición de la coalición de potenciar las medidas preventivas, ya que, según el edil de Medio Ambiente, el tratamiento que se aplica en la capital «es superior y más completo que el fijado por el decreto de la Junta».

Jiménez, que fue el encargado de defender su gestión frente a la exigencia de dimisión de IU, indicó que no sentía que su responsabilidad fuese tan nefasta al llevar solo nueve meses en el cargo mientras que la plaga del picudo rojo lleva varios años de actividad.

IU le recriminó no seguir el protocolo de actuación frente al picudo rojo promovido por la Junta, pues éste exige que los ejemplares que hayan muerto deben ser retirados de inmediato y en el caso del Parque de Málaga «no se ha hecho».

El protocolo exige su retirada, según IU, para evitar que se conviertan en foco de concentración de bichos y especialmente porque corren el peligro de desplomarse, lo que las convertiría en un peligro para los viandantes, en el caso del las del Parque de Málaga.

La concejala de IU Ana García Sempere, que defendió la moción de su grupo, calificó de «fuera de lugar» el que el edil de Medio Ambiente aludiera a una palmera que el vicepresidente de la Junta de Andalucía, Diego Valderas tiene en su casa afectada, al parecer, por el picudo rojo.