La Universidad de Málaga ha hecho sus cálculos y atenderá a la petición realizada por la Cámara de Cuentas reduciendo su estructura de departamentos para ahorrar aún más recursos económicos. Pese a los brotes verdes que los gobernantes dicen ver en la economía, las universidades tienen que seguir apretándose el cinturón. La rectora de la malagueña, Adelaida de la Calle, explicó ayer en rueda de prensa que la UMA ya está tratando de simplificar su estructura orgánica para atender estas recomendaciones, lo que dará como resultado la supresión de unos 15 departamentos y tres unidades administrativas.

La Opinión de Málaga ya informó de que la Cámara de Cuentas de la Junta había pedido a las universidades públicas andaluzas que redujeran o fusionaran los departamentos que cuenten con menos de doce profesores con vinculación permanente, una situación que provocó airadas discusiones en la reunión del Consejo de Gobierno del 19 de junio. Estos desajustes se deben que la tasa de reposición es sólo del 10%. «Se han ido jubilando profesores y no hemos podido reponerlos», insistió la rectora.

Así que de los 81 departamentos de la UMA, finalmente se suprimirán 15, así como las tres unidades administrativas existentes. De la Calle respondió ayer a la vicesecretaria de Acción Política del PP de Málaga, Ana Corredera, quien el domingo instó en un comunicado al Consejo de Gobierno de la UMA a que «valore si el número y la distribución de tareas investigadoras y docentes del profesorado se ajustan a las necesidades reales de la demanda del alumnado», con el fin de que «se simplifique la estructura orgánica y se reduzca el déficit».

En cualquier caso, la UMA tiene aún seis meses para realizar estos ajustes.