­Por primera vez en mucho tiempo en Málaga existe unanimidad: la plaza de Camas es un lugar inhóspito y poco disfrutable. Una oportunidad perdida para lograr un espacio de encuentro para los vecinos del Centro, donde no existen demasiados espacios libres para uso ciudadano. El Ayuntamiento asume su error y en un gesto poco acostumbrado, ha pedido perdón a los vecinos. Y está dispuesto a rectificar. Por este motivo, hoy los reunirá en la sede de Urbanismo para presentarles las modificaciones que piensa acometer para hacer de esta plaza un entorno más habitable.

La presidenta de la asociación de vecinos Centro Antiguo, Ester Ramírez, confía en que esta vez el Ayuntamiento tenga en cuenta la opinión de los residentes de la zona, «y no se limite a poner cuatro parches». «Espero que los cambios propuestos sean sustanciales, pero no deja de ser lamentable que después de tanto dinero invertido haya ahora que plantear estas reformas», señala.

Los vecinos piden más espacios de sombra, zonas ajardinadas, un parque infantil para niños de hasta tres años de edad, aparatos de gimnasia para mayores, bancos y otro mobiliario urbano, que se soterren los contenedores de basura y que se sustituya la iluminación, que consideran excesiva. «Nos defraudaría mucho que de nuevo no atendieran nuestras reclamaciones», señaló ayer Ramírez.

El pleno del Ayuntamiento celebrado ayer trató esta polémica a raíz de las mociones presentadas tanto por el grupo municipal socialista como de IU. En ellas, ambos partidos coincidían en apuntar que el resultado final es fruto «de las prisas y la improvisación» del equipo de gobierno, según el PSOE; y una plaza convertida en un «mamotreto y un desierto de cemento», según IU.

Del mismo modo, criticaron con dureza que las modificaciones introducidas en el proyecto respecto a lo que se había diseñado inicialmente pueda suponer la pérdida del 80% de la financiación aportada por Fondos Europeos, un total de 656.000 euros que tendrían que salir ahora de las arcas municipales. Sin embargo, el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento, Francisco Pomares, se mostró ayer convencido de que la ciudad podrá mantener esta inversión europea.

No quiso adelantar el contenido de la reunión que hoy mantendrá con los vecinos y los comerciantes del Centro. No avanzó las propuestas que les planteará para mejorar la plaza ni el presupuesto. Pero sí asumió personalmente lo que calificó como un «error» y reconoció que quizás no se habían tenido en cuenta las peticiones de los residentes.

Por este motivo, el equipo de gobierno aprobó los acuerdos planteados por la oposición en sus mociones respecto a abrir los cauces necesarios de la participación y el diálogo con la ciudadanía y desarrollar las modificaciones necesarias para mantener la financiación europea, teniendo en cuenta además que la plaza aún no está terminada ni recepcionada, como recordó Pomares.