Fue la sensación del verano el año pasado. Parece que este se ha pasado un poco la fiebre, pero aun así volveremos a contemplar a personas volando sobre el mar. La culpa la tiene el flyboard, la nueva sensación playera. ¿Todavía no lo conoce? Es solo cuestión de tiempo que vaya paseando por alguna playa española y vea a alguien elevándose varios metros sobre el nivel del mar. No se preocupe, es un deporte y todo está bajo control.

Y ahora se preguntará, ¿qué es exactamente el flyboard? En pocas palabras, se trata de una manguera y una tabla conectadas a una moto de agua que produce un chorro a propulsión, lo que permite elevarse a una persona varios metros sobre el mar. Algunos incluso han llegado a superar los 13 metros.

A Málaga esta nueva moda llegó pronto. Javier García, encargado de Water Sport Banus, afirma que fue él el primero que trajo a la provincia esta nueva modalidad. Fue hasta el país galo y conoció a Franky Zapata, su inventor. Probaron el prototipo e hicieron el debut en la Costa del Sol en 2011. «Al principio fue difícil, pero poco a poco se ha ido formalizando y ahora es una experiencia única», confirma.

No es el único sitio donde puede practicarse. También en Marbella se localiza Funny Beach, otra empresa que ofrece esta actividad. Su encargado, Santiago Helmann, asegura que llevan también tres años ofertándolo: «El año pasado fue un boom, pero este está más tranquilo».

¿Y cuánto cuesta poder disfrutar de unos minutos de levitación? Funny Beach ofrece 15 minutos por 75 euros mientras que Water Sport Banus da 20 minutos por 120 euros. Aunque si son dos personas o más, el precio se reduce. Para probarlo no es necesario ningún tipo de instrucción previa, aunque los primeros minutos son para tomar contacto con el aparato. Después ya viene la diversión. García atestigua que es fácil manejarlo, ya que el 98% de personas que lo prueban consiguen volar.

En Water Sport Banus lo máximo que pueden alcanzar los principiantes son cuatro metros. Sin embargo, los más avezados pueden superar los nueve. Todo depende de la práctica.

Personajes como Leonardo DiCaprio, Messi, Fábregas y Tom Cruise son algunos de los que se han atrevido a experimentar con el flyboard. La experiencia, según dicen los que lo han probado, es inigualable. Javier García ha tenido la suerte de ello: «Es difícil de describir», confiesa, «sientes una sensación de ingravidez, cuando te bajas parece que aún puedes despegar del suelo». Helmann tampoco ha dejado escapar la ocasión de practicarlo: «Es una experiencia increíble. Cuando te elevas y logras controlarlo, estás volando».

Ya saben qué hacer este verano: echarse a volar.