La joven de 20 años que denunció haber sido violada el pasado 17 de agosto cuando salía de trabajar de una caseta del Real en la Feria persiste en denunciar a los jóvenes que la acompañaron esa noche.
La joven ha decidido continuar la causa contra los menores, pues la que afecta a los mayores de edad -tres de ellos- ya ha sido archivada de manera provisional. Sin embargo, la de los menores -que afecta a otro juzgado- no había sido archivada y por tanto continuaba abierta. Los dos jóvenes estuvieron internados en dos centros de Almería y Córdoba mientras la juez del Juzgado de Instrucción número 2 recopilaba pruebas e información respecto al caso, que fue archivado tres días después previa libertad de los detenidos.
Los abogados de los dos menores recibieron ayer sendas notificaciones que les informaban de que el abogado de la chica se había personado con el objeto de continuar con la causa.
Los jóvenes fueron inicialmente acusados de los delitos de robo, violación y lesiones, quedando todos ellos desestimados por la juez que llevaba la causa abierta contra los mayores de edad.
Una de las pruebas de mayor peso en la decisión de la magistrada fue un selfie tomado a la hora de la supuesta violación en la que se la veía en compañía de estos en situación amigable y con las pertenencias que supuestamente los jóvenes le habían robado. En su momento, la denunciante informó de que le habían robado el bolso con su teléfono móvil y la cartera con 33 euros que había ganado aquella noche como relaciones públicas.
En el archivo del caso fue fundamental que todos los abogados, tanto de la defensa como de la acusación, quedaron conformes con que se diera por finalizada la instrucción visto el contenido de las pruebas y estimándolas como suficientes.
Mientras no se archive la causa contra los menores los abogados no van a iniciar la querella por falsa denuncia contra la joven. No obstante, creen que la nueva línea abierta tiene pocas probabilidades de salir adelante, creyendo, en todo caso, que el letrado de la acusación se centrará en el supuesto robo del bolso de la denunciante.
Un caso mediático y muy cuestionado
El caso de la supuesta violación de la Feria de Málaga quedó descartado solo tres días después de conocerse la denuncia. Para entonces había llegado a todos los rincones de España: cinco jóvenes habían agredido supuestamente sexualmente a una joven cuando salía el domingo de trabajar.
El martes, los jóvenes fueron dejados en libertad con los cargos de violación y robo a expensas de que la juez tomara una decisión. Menos de 24 horas después archivaba la causa tras haber visionado el vídeo de la relación sexual y tras haber hablado con hasta nueve testigos que aseguraron que la relación sexual fue consentida.
El testimonio de estos fue clave, pues coincidía con el de los presuntos agresores, que en todo momento negaron los cargos.
La repercusión de la decisión judicial no tuvo precedentes y las redes sociales y los medios de comunicación vieron cómo la juez y la fiscal eran insultadas. Colectivos feministas tacharon la decisión de machista y la propia Audiencia, el TSJA y el Colegio de Abogados tuvieron que defender la decisión y pedir sensatez.
