La movilidad es un asunto prioritario en Málaga, o al menos es lo que quiere demostrar el Ayuntamiento. Para ello, ayer realizaron una especie de carrera para buscar los puntos débiles, así como los fuertes, de cada medio de transporte. Para ello se dispusieron cuatro equipos. Cada uno de ellos debía salir desde la Ciudad de la Justicia a la vez en diferentes medios de transporte -autobús, bicicleta, coche, y taxi-. El objetivo era llegar al Archivo Municipal.

La prueba está encuadrada en los actos conmemorativos de la Semana de la Movilidad. El estudio final servirá para las investigación de la Cátedra de Transporte de la Universidad de Málaga. Así lo señaló el concejal de Movilidad y Accesibilidad, Raúl López, ya que «estas iniciativas servirán para diagnosticar los efectos que conllevan cada uno».

El edil también tomó parte en el carrera. Él viajó, con varias voluntarias, en el autobús de la EMT, que por cierto fue el primero en llegar a su destino final. De hecho, los tiempos marcados por la organización fueron de 19 minutos para el autobús, 19,5 para las bicicletas, 20 para el taxi y 21 para el coche.

El Ayuntamiento también se fijó en el gasto que había tenido cada transporte en la prueba. Según los gastos estimados para la distancia de 4,4 kilómetros, las bicicletas sólo nueve céntimos, 96 el viaje en autobús, 5,72 el coche y el taxi fue el más caro con 6,94 euros de coste.

Debido al amplio gasto que suponen los medios de transporte individuales, incluso si son públicos, el concejal aconsejó que «el coche privado sólo se debe usar para trayectos largos, y que no exista un transporte público que se pueda usar». Recomendó utilizar el transporte público en cualquiera de sus formatos, en especial el autobús y las bicicletas, por el ahorro que suponen para el usuario.

Muchos de los participantes consideraron «enriquecedora» la prueba. Pero también encontraron algunas taras a los transportes usados. Por ejemplo, Sergio Diachuk, usuario de bicicleta, encontró problemas a la hora de aparcar la bici en las estaciones pertinentes. También Ana y Beatriz, las participantes con el coche privado, se encontraron en apuros a la hora de acceder a un aparcamiento. Iban a aparcarlo en el parking de la plaza de la Marina, pero a tan temprana hora les retardó mucho acceder a él por su elevada ocupación.

El concejal de Movilidad espera poder realizar en próximos años pruebas como la de ayer con el metro en funcionamiento. «Se estudió la posibilidad de hacerlo en ésta, pero su lejanía al Centro lo hacía inviable para el usuario que fuera en él», también aclaró López.

Al hilo de esta experiencia del Ayuntamiento con la Cátedra de Transportes de la UMA, el edil de Movilidad aprovechó para proponer una acuerdo con la Junta en la construcción de carriles bici. Esta medida serviría para impulsar aún más el uso del sistema público de bicicletas. López explicó que ya son más de 20.000 los usuarios del servicio y 20 estaciones con 600 puntos de atraque.

Esta bicicleta no, pero las privadas también tienen desde ayer un facilidad para sus usuarios. Se puso en marcha un servicio de estacionamiento para este tipo de vehículos. El servicio, en un principio, lo ha puesto el Consistorio en marcha en cuatro aparcamientos municipales. «Los primeros días serán gratuitos y después se establecerá un bono mensual», aclaró López. También aseguró que el Ayuntamiento está estudiando la posibilidad de establecer billetes diarios para el uso de estos estacionamientos «ya que muchos usuarios no lo está requiriendo».