El proyecto del estudio de arquitectura de Javier Gamero de crear una plaza de 2.057 metros cuadrados con aparcamiento subterráneo que dé protagonismo a la ermita de Zamarrilla, en la calle Mármoles, cuenta con el apoyo de un empresario que estaría dispuesto a costear las obras a cambio de la explotación del parking, informó esta semana el propio Javier Gamero.

El plan del arquitecto, que además es vecino del barrio, fue adelantado por La Opinión en marzo de 2013 y se ha dado a conocer en el reciente foro Greencities de sostenibilidad urbana, celebrado los pasados 2 y 3 de octubre en el Palacio de Ferias.

La propuesta no pudo presentarse el año pasado a los vecinos -pese al apoyo de la asociación de vecinos de la Trinidad y la Federación de Autónomos, Comerciantes y Empresarios de Málaga y Provincia- por el rechazo de algunos de ellos, lo que impidió que el acto continuara. El colectivo que más se opone al plan es el de los comerciantes de la zona, que envió a este periódico una carta firmada por medio centenar de ellos en la que resaltaban los serios problemas de tráfico y económicos que causaría. A raíz de esta carta, los concejales de Urbanismo y Movilidad de entonces, Diego Maldonado y Raúl López, informaron de que sin consenso no habría ningún cambio en la zona.

Estos obstáculos, sin embargo, no desaniman a Javier Gamero, quien subrayó que aunque las líneas generales están trazadas, «es un proyecto abierto», que en último caso, «siempre se puede hacer sin aparcamiento».

«Estamos aquí porque nos sigue apoyando mucha gente. Con este proyecto tendríamos una calle Larios de barrio en una zona carente de espacios verdes y libres y además la ermita destacaría. Hoy tenemos un patrimonio menospreciado», argumentó.

«Sólo 12 comercios»

Con respecto a la oposición de los comerciantes, destacó que «sólo 12 comercios» serían los afectados de forma directa y a cambio, «aumentaría el valor patrimonial, social y económico de toda la zona» y las tiendas aumentarían las ventas.

En relación al problema del tráfico por el corte que supondría en calle Mármoles, el proyecto plantea un anillo, en el que los coches se desviarían por la calle Lanuza y los autobuses por la plaza de Bailén. «Además, se recuperaría el doble sentido en la calle Mármoles. ¿Qué hay 45 segundos más de coche?, pues sí, tienes que ceder, pero en todo caso la solución última la tendría que dar Tráfico», respondió.

Con un parking subterráneo debajo, la propuesta de plaza incluiría pérgolas con plantas trepadoras que darían lugar a entre 200 y 300 metros cuadrados de zonas verdes, -«serían unos jardines colgantes», apuntó»- además de árboles con macetones.

El proyecto ya fue presentado el año pasado a la Hermandad de Zamarrilla. El presidente de la gestora, Francisco Díaz, a título particular, señaló en La Opinión que la plaza le parecía una idea «oportuna», aunque también dijo que no le seducía un aparcamiento subterráneo por los posibles daños a los comercios.

En este sentido, Javier Gamero pidió la oportunidad de poder explicar el proyecto a vecinos y comerciantes, algo que no pudo hacer el año pasado.

Además, anunció la intención de reunirse con el alcalde, Francisco de la Torre, para exponerle la propuesta, al entender que hace falta «el empujón político». «Tenemos un proyecto muy viable económicamente que puede revalorizar y potenciar una zona sin espacios libres y con la ermita en una esquina, por la que es difícil pasar. Puede ser una pequeña calle Larios, el núcleo social de la zona», concluyó.