­Entre un 5 y un 10% de las malagueñas heredan el cáncer de mama. Estos datos han llevado al SAS a replantearse una petición que en los últimos años había tomado fuerza, la de la implantación del test genético. Con motivo del Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mama que se celebra mañana domingo, la Consejería de Salud pondrá en marcha un consejo genético oncológico para reducir la incidencia, morbilidad y mortalidad del cáncer de mama en mujeres con alto riesgo familiar con un programa de pruebas diagnósticas basadas en la biología molecular.

Salud asumirá las pruebas diagnósticas de biología molecular del cáncer de mama. Para ello, se optará por un modelo de secuenciación masiva (5 genes), con plataformas diagnósticas que se ubicarán en dos laboratorios de referencia. Igualmente, se dispondrá de una consulta de consejo genético oncológico en varios hospitales, como el Carlos Haya de Málaga.

También se reforzará el circuito de abordaje, en previsión de un incremento del número de casos. Así, las mujeres de alto riesgo podrán ser sometidas, según su nivel de riesgo y previa aceptación de la mujer, a alguno o varios de los siguientes procedimientos, como la vigilancia periódica, generalmente con resonancia magnética, la quimioprofilaxis con tamoxifeno u otros o la mastectomía profiláctica.

Se estima que en los primeros años de la implantación del Consejo Genético Oncológico en Andalucía para el cáncer de mama, se realicen pruebas genéticas a una media de 270 pacientes al año, a lo que deben sumarse las pruebas de los familiares directos si es positivo el test, por lo que la cifra total de personas beneficiarias cada año sería de más de 1.500.

Según la consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, la Junta apuesta por la equidad y accesibilidad en lo que se refiere a pruebas genéticas y consejo genético y se suma así a la elaboración de protocolos de prevención, diagnóstico precoz y tratamiento que proceda en cada caso.

El consejo genético es un proceso informativo sobre el riesgo de padecer cáncer que tiene cada sujeto; las posibilidades de transmitirlo a las siguientes generaciones; las medidas preventivas y terapéuticas que se pueden realizar para evitarlo o diagnosticarlo de forma precoz; y la rentabilidad clínica de realizar un test genético cuyo resultado permita optimizar la estimación del riesgo percibido.

Sánchez Rubio señaló asimismo que para la implantación de este consejo genético se cuenta «con la experiencia y trabajo ya consolidado en muchos de los centros de la sanidad pública andaluza, por lo que se trata de homogeneizar los protocolos de asistencia, ordenar la realización de pruebas genéticas necesarias y poner en marcha el consejo genético oncológico en Andalucía para reducir la morbilidad y mortalidad asociada al cáncer desde la prevención y el diagnóstico precoz».

Cada año se diagnostican 3.300 casos de cáncer de mama, con un porcentaje de curación que supera el 90% cuando se diagnostica precozmente, según los datos aportados ayer viernes por la consejera.

El cáncer de mama es la primera causa de muerte por patología tumoral en la mujer en todos los países occidentales y la tasa de supervivencia mejora cuando se diagnostica precozmente. Andalucía cuenta, desde 1995, con el Programa de Detección Precoz de Cáncer de Mama que ha logrado detectar 9.287 tumores entre las mujeres citadas para realizarse una mamografía.

A través de este programa, puesto en marcha hace 18 años, se han explorado a más de 974.000 mujeres con edades comprendidas entre los 50 y los 69 años, que componen la población diana de este programa puesto que en estas edades se registra un mayor riesgo de padecer cáncer de mama.