­La consejera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio del Gobierno andaluz, María Jesús Serrano, rechazó ayer el proyecto Siroco con el que se prevé realizar prospecciones de gas y petróleo en la costa de Mijas y aseguró que la iniciativa «tendría que tener ya un no rotundo del Gobierno de España». No obstante, indicó que la Junta de Andalucía «tendrá mucho que decir» sobre este proyecto. Serrano, que visitó el buque rompehielos Artic Sunrise de la ONG ecologista Greenpeace, que se encuentra en el puerto de Málaga capital para realizar una campaña contra las prospecciones en la zona, aseguró que «desde el Gobierno andaluz no compartimos este proyecto porque tiene demasiadas voces en contra».

La consejera dijo que «tampoco entendemos cómo el Gobierno central mantiene la autorización para este proyecto en Mijas» -liderado por Repsol-; mientras que «ha rechazado la declaración de impacto medioambiental para las prospecciones en el Mar de Alborán y en las costas de Nerja y Torrox, apenas a 70 kilómetros de distancia, cuando los riesgos para la fauna, la flora y las emisiones y vertidos son los mismos».

La responsable regional de Medio Ambiente explicó que la autorización hasta ahora es «exclusiva del Ministerio» e incidió en que «la Junta de Andalucía todavía no ha dicho nada porque lo que tiene es un permiso de investigación». «En el momento en el que se convirtiera en permiso de explotación, desde luego sí que se tendría que tramitar la autorización ambiental unificada, tal y como corresponde con nuestra normativa, y entonces la Junta de Andalucía tendrá mucho que decir», profundizó antes de añadir que cuando se pida esa autorización «tendremos que tramitarla de acuerdo con la Ley de Gestión de la Calidad Integral y tendrá que cumplir todos los requisitos».

Riesgos ambientales

Al respecto, indicó que «si dice esa tramitación y el expediente que se estudie que no cumple, evidentemente diremos que no», pero insistió en que «de partida, nuestro concepto es no a este tipo de energía y no a este tipo de proyectos de prospecciones de hidrocarburos». La consejera dijo que «no es un confrontación partidaria ni política como muchas veces pretende el PP-A señalar», sino que se produce «porque entendemos que con estas prospecciones existen riesgos ambientales, para la actividad económica y para las energías que no compartimos, como son las basadas en los hidrocarburos, cuando las energías renovables aportarían mucho más». En cuanto a las razones económicas, avanzó que los riesgos «están claros» al situarse las prospecciones «en un sitio en el que la actividad pesquera y turística es una base fundamental». Respecto al medio ambiente, insistió en que aunque los riesgos no estén constatados aún en su totalidad «como dicen algunas voces», existe el principio de precaución «porque hay constatación de lo que podría suponer para la fauna y para la biodiversidad». «Nosotros apostamos por un modelo energético basado en las energías renovables, tenemos un potencial increíble y tenemos que ir dejando la economía basada en los hidrocarburos, porque, además de cara, puede producir muchísimos efectos contra el medio ambiente y el patrimonio natural», ha aseveró Serrano antes de añadir: «debemos luchar contra el cambio climático, una de las grandes amenazas que tiene esta tierra y contra la que la Junta ya está tomando medidas».

Por su parte, el responsable de Greenpeace en Andalucía, Juan de Dios Fernández, dijo que el buque Artic Sunrise «está en Málaga para dejar muy claro que proyectos para la extracción de hidrocarburos tanto en el ártico como en la Costa del Sol como en Canarias es una apuesta por el pasado, por un modelo que ya ha demostrado ser obsoleto y que tiene unas consecuencias medioambientales y económicas muy negativas».